Jonathan Franzen: «La rabia se ha apoderado de Estados Unidos»

david valenzuela NUEVA YORK / EFE

CULTURA

Hoy llega a las librerías españolas «Libertad», la nueva novela del autor

01 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El aclamado escritor estadounidense Jonathan Franzen asegura que su país está tomado por la «rabia», sobre todo en el terreno político, y lamenta que su presidente, Barack Obama, sea la principal víctima de un sentimiento que algunos grupos explotan al mezclarlo con grandes dosis de miedo.

«La rabia se ha apoderado de EE. UU.», aseguró en una entrevista en Nueva York el autor, en cuya última novela, Libertad, que sale a la venta hoy en España, refleja en cierta medida el ambiente de frustración de los estadounidenses tras los atentados del 11-S y después a causa de los efectos de la recesión.

Franzen, que con ese título ha reunido buenas críticas y muchos lectores desde que apareció hace un año en este país, asegura que los estadounidenses viven enfadados: «La derecha odia a la izquierda y la izquierda odia a la derecha, pero es que la gente además tiene el sentimiento de que el mundo está fuera de control», apunta.

El desasosiego y la rabia de la clase media estadounidense es precisamente uno de los temas que trata en Libertad, junto a «otras problemáticas a las que ahora no se presta atención, como la evolución de las relaciones entre padres e hijos o la decidida determinación con la que destruimos el planeta».

Ahora mismo, Franzen (Saint Louis, Misuri, 1959) se siente «poco optimista» con Estados Unidos, que vive una realidad que ha cambiado sobremanera en las últimas tres décadas, las que han dejado su huella en la familia Berglund, los protagonistas de Libertad.

«El poder económico se mueve hacia China. Con todo nuestro poder militar, somos incapaces de derrotar a los talibanes en Afganistán», reflexiona el escritor, quien, sin embargo, considera que su país ha ido a mejor después de que George W. Bush cumpliera su segundo mandato como presidente y llegara Barack Obama a la Casa Blanca. «La noche en que Obama fue elegido presidente fue la más emocionante de mi vida. Me sentí muy feliz y orgulloso de haber puesto a un hombre negro en la Casa Blanca. Fue increíble», asegura Franzen, quien reconoce que el mandatario «no es perfecto».

¿Gestión o raza?

Obama es «esa gran decepción para la izquierda y ese gran anticristo para la derecha», se lamenta Franzen, quien reconoce que, si el presidente está pasando por un momento difícil, en el que se critica su gestión, es en gran medida por su raza.

«Pronto los blancos dejaremos de ser la mayoría en este país. El poder político se mueve hacia los hispanos, los asiáticos y los afroamericanos. Hay grupos que se ven sin poder y eso hace que la rabia se apodere de ellos», sostiene el autor, que ejemplifica su opinión con el surgimiento del movimiento del Tea Party. «El Tea Party da miedo, pero no puede gobernar», dice Franzen, que considera que, pese a todo, Obama tiene «grandes posibilidades» de ganar las elecciones del 2012 y permanecer un mandato más.

Franzen tardó en escribir Libertad nueve años -su anterior novela, Las correcciones, apareció en el 2001-, casi una década, cuyo ambiente queda reflejado a la perfección en la realidad post 11-S de Patty y Walter Berglund, «dos personas que, como muchas otras, luchan por saber cómo vivir», y de sus hijos y allegados.

A modo de retablo de la época que atraviesa Estados Unidos, Franzen crea la que define como «una comedia sobre asuntos personales muy dolorosos», los que viven los miembros de una familia ideal a primera vista, pero que se derrumba por momentos ante la lucha por una libertad que quizás no conlleva la felicidad.