El gallego Rodrigo Cortés brilla en Sundance con la película «Buried»

CULTURA

La productora Lionsgate compró los derechos de la cinta, protagonizada por Ryan Reynolds, para distribuirla en EE.UU.

28 ene 2010 . Actualizado a las 19:20 h.

Paul Conroy despierta. Ha sido enterrado en una caja de madera. Está en Irak. Conroy, contratista civil, solo dispone de un mechero Zippo y un móvil cuya batería y cobertura agonizan. Esta es la historia contada por un gallego que ha deslumbrado en el Festival de Sundance, el santuario estadounidense del cine independiente levantado por Robert Redford. La película Buried (enterrado), del director ourensano Rodrigo Cortés, ya ha sido comprada por la productora Lionsgate en una operación considerada como el primer gran negocio de esta edición del concurso. La cinta de Cortés, de 36 años, es una producción española rodada en inglés con guión de Chris Sparling. Su protagonista es Ryan Reynolds, pareja de la actriz Scarlett Johansson. Costó poco más de dos millones de euros. Llegó a Sundance fuera de competición. Y su estreno fue recibido por los espectadores con una gran ovación. «Es el mejor de los escenarios posibles, estoy muy contento», indicó el ourensano. La compañía de «Mad Men» Lionsgate apostó en su momento por la franquicia de terror Saw y está detrás de películas como Precious y de series como Mad Men . Esta empresa distribuirá la película en Estados Unidos después de ganar a Fox Searchlight en la puja por la obra de Cortés. The Wall Street Journal señala que la compañía americana ha desembolsado 2,2 millones de euros, aunque otros medios elevan la cifra a 7 millones. Jason Constantine, responsable de compras de la Lionsgate, aseguró que Buried es uno de los thrillers más intensos que ha visto. Los críticos estadounidenses elogian una película sin tregua que se sostiene con solo un actor y un escenario. El propio autor afirma que se ha inspirado en Alfred Hitchcock, y recuerda que el británico rodó Náufragos con un bote y un puñado de intérpretes y realizó La soga en un plano secuencia. El rodaje, que tuvo lugar en Barcelona el pasado verano, fue todo un desafío para Reynolds. Antes de que la cinta se exhibiera en Sundance señaló: «Espero que esta película os guste tanto como yo he sufrido filmándola». Aseguró que Cortés lo convenció para formar parte del proyecto con una especie de argumentario de unas quince páginas. Buried está avalada también por su inclusión en la Black List, los guiones más destacados del año según los ejecutivos de Hollywood. «Desde que leí el texto, quise rodar la película», asegura Cortés. El gallego trabaja en un nuevo proyecto que ya tiene título, Red Lights , una cinta que se adentra en el terreno de lo paranormal. Aunque, después de Sundance, nada será igual.