Descubren en Baiona el mayor yacimiento submarino de Galicia

M. Torres / A. Martínez

CULTURA

Se trata de una colección única y fundamental para el estudio de la sociedad española del XVI al XIX

29 mar 2008 . Actualizado a las 03:01 h.

Cerámicas, armamento, exóticas vasijas chinas, ánforas, lanzas, pertrechos de embarcaciones, un cañón y, así, hasta 35.000 piezas datadas entre los siglos XVI y XIX. En total, tres toneladas de un patrimonio de incalculable valor que atesoraba el fondo de la bahía de Baiona y que la empresa Archeonauta ha rescatado de su fondo.

El arqueólogo, Miguel San Claudio, director de la intervención, dio a conocer ayer la magnitud del hallazgo. «Sin duda, el yacimiento submarino más grande de Galicia en cuanto a material recuperado y puesto a disposición de la investigación y del público», confirmó el especialista.

Los trabajos de dragado se realizaron durante los últimos cinco meses tras una prospección arqueológica sufragada por Portos y enmarcada en el proyecto de ampliación del muelle baionés que confirmaba la existencia de un importante depósito de material sobre el fondo.

Este descubrimiento no sorprendió, ya que Baiona fue siempre uno de los puertos más importantes de Galicia durante la Edad Media. Sin embargo, la media de restos recuperados, centenares por cada semana de prospecciones, así como la variedad en los objetos y su datación, sí han sido extraordinarios. San Claudio destacó precisamente: «Casi todo nos fue sorprendiendo de una forma u otra pero, quizás, lo más llamativo de todo es el conjunto, la constatación de un tráfico comercial y mercante de primer orden en su momento que hoy hemos podido detectar».

El proceso de catalogación de este tesoro, que comenzará la próxima semana, podría ampliar aún más el intervalo de estudio ya que «algunas de las piezas son probablemente de la época romana».

La cultura material recuperada permitirá analizar un período histórico como es la Edad Moderna, «con unas piezas excepcionales tanto en calidad como en cantidad, que nos remiten al comercio atlántico europeo y aun más allá, al circuito mundial establecido por la Corona Española durante los siglos XVI al XIX». El estudio, manifestó el especialista arqueólogo, «posibilitará poner al alcance de la investigación en España una colección única, que será especialmente útil en un campo con tan pocas referencias en nuestro país como el que abarca este yacimiento».