Tres nuevas rotondas regularán el tráfico en la avenida de Vilaboa

JUAN TORREIRO CULLEREDO / LA VOZ

CULLEREDO

Elena Silveira

El Concello proyecta un cambio radical en la N-550

03 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras asumir la titularidad la N-550 a su paso por Culleredo, el gobierno local ya tiene vía libre para poner en marcha uno de los proyectos que lleva años demandando a Fomento: humanizar y ordenar el tramo urbano que va desde O Portádego hasta Vilaboa. Se trata de un trayecto de poco más de un kilómetro que soporta de forma recurrente atascos y retenciones a unos metros de los domicilios de muchos vecinos.

El proyecto que pretende llevar a cabo el gobierno de Sacristán cambiaría completamente el aspecto de esta zona, pasando la peligrosidad que genera siempre una carretera nacional a una travesía urbana mucho más respetuosa y acorde con un área residencial, que es en lo que se han convertido los núcleos de O Portádego, A Corveira y Vilaboa, que juntos suman más de 10.000 habitantes.

Mejoras para los residentes

«Será una oportunidad de desarrollo para la zona», dijo Sacristán tras firmar la cesión de la carretera. Según fuentes municipales, el proyecto implicaría cambios en algunas calles, construcción de aceras más anchas. Incluir mobiliario urbano, además de la creación de pequeñas zonas de esparcimiento para disfrute de los vecinos. El plan, según fuentes municipales, pivotaría sobre la construcción de tres nuevas rotondas para regular el flujo de tráfico en lo que ya es la avenida de Vilaboa. La primera, en O Portádego, en el cruce con la Alcalde Electo Carballo (a la altura de Radio Culleredo), facilitando así el acceso a A Corveira. La segunda, antes de la iglesia de Vilaboa, eliminando la peligrosa semirrotonda actual para el cambio de sentido, que permitirá enlazar la nueva avenida con las calles Senra y Domingo Sierra. La última estaría ubicada a la altura del paso de la AP-9. Se trata del punto más conflictivo y que más críticas despierta entre los residentes por el caos de tráfico y semáforos que provoca la confluencia de cuatro calles: Domingo Sierra, Vicente Risco, Calzada y Xafonte.

A pesar de contar con informes propios, desde el Concello aseguran que encargarán el estudio del proyecto a una empresa externa. La idea es iniciar la primera fase dentro de esta legislatura, gracias al colchón económico de los más de 3 millones de euros de los fondos europeos Edusi, que el gobierno local pretende destinar en parte para financiar el proyecto.

Para todas estas actuaciones y decisiones, el gobierno local seguirá contando con las aportaciones de los consejos de participación ciudadana.

La tercera ronda restó más de 10.000 vehículos a esta zona

Con la puesta en marcha de la tercera ronda, el tráfico en esta zona de Culleredo descendió considerablemente, ya que muchos usuarios utilizaban esta vía solo de paso o acceso al aeropuerto. Con las alternativas de las nuevas vías de alta capacidad se redujo el flujo de coches en cerca de un 10 %, pasando de los casi 30.000 vehículos al día antes de la apertura de la tercera ronda, a los poco menos de 20.000 que transitan en la actualidad. Por este motivo, el gobierno local cullerdense cree que es el «momento perfecto» para proyectar y acometer importantes mejoras en este tramo.