La Xunta avala la declaración de impacto ambiental de la planta de amoníaco verde de Ignis en el puerto exterior de A Coruña

LA VOZ ARTEIXO

A CORUÑA CIUDAD

Vista aérea de Langosteira con la parcela (en violeta) donde se levantará la planta de amoníaco verde de Armonia Green Galicia, filial de la energética Ignis
Vista aérea de Langosteira con la parcela (en violeta) donde se levantará la planta de amoníaco verde de Armonia Green Galicia, filial de la energética Ignis

La fábrica tendrá capacidad para producir 145.000 toneladas al año con la fase uno del proyecto que se pondrá en marcha en el 2027 y en la que invertirá 380 millones de euros

19 dic 2023 . Actualizado a las 08:33 h.

El proyecto para construir una planta de hidrógeno y otra de amoníaco verde de Grupo Ignis en A Coruña da un nuevo paso. La Dirección General de Calidad Ambiental, Sostenibilidad y Cambio Climático de la Xunta publicó este lunes la declaración de impacto ambiental favorable de la planta de producción y almacenamiento de amoníaco de su filial Armonia Green Galicia en el puerto exterior de punta Langosteira. 

Según publica este lunes el Diario Oficial de Galicia (DOG), la Xunta considera que este proyecto es ambientalmente viable. Se trata de una planta que ocupará una superficie de 103.685 metros cuadrados, cuyo objetivo es la producción de amoníaco mediante el sistema de Haber-Bosch, empleando en el proceso nitrógeno e hidrógeno electrolítico. El amoníaco almacenado será enviado hasta el muelle denominado El Martillo, situado al final del dique de abrigo del puerto exterior, donde se prevé la instalación de un amarre público para barcos. Allí, Ignis procederá a su descarga en embarcaciones para permitir su exportación.

El hidrógeno requerido para el proceso de producción de amoníaco será suministrado a través de un hidrogenoducto procedente de la planta que se situará en la parcela comprada por Resonac a Alu Ibérica, con una capacidad total de electrólisis de un gigavatio (que está fuera del alcance de la declaración ambiental aprobada). La producción de hidrógeno se materializará en tres fases de 200, 400 y otros 400 megavatios hasta alcanzar la potencia total previamente señalada, motivo referido en el estudio ambiental por el cual las futuras instalaciones para la producción, almacenamiento y descarga de amoníaco fueron consideradas respecto a la escalada de tres fases, referido a la planta de suministro de hidrógeno.

La empresa estima que el centro tendrá capacidad para producir 145.000 toneladas de amoníaco al año con la fase uno del proyecto puesta en marcha en el 2027, en la que prevé invertir 380 millones de euros para las dos factorías. Luego, tras la puesta en marcha de la fase dos, Ignis quiere producir 435.000 toneladas anuales y, finalmente, en la etapa tres, espera llegar a las 725.000 toneladas. Los plazos estimados para la conclusión de esta última fase se sitúan entre los ejercicios de 2030 y 2031.

Además, el proyecto contempla la posibilidad de descargar amoníaco procedente de ferrocarriles y realizar el almacenamiento del producto en las infraestructuras incluidas en el proyecto, que se ubicará en la zona norte del puerto exterior de A Coruña.

La Administración gallega concluye en el documento que el proyecto es ambientalmente viable siempre que se cumpla todo lo recogido en el estudio de impacto ambiental y en la restante documentación evaluada.

Esta planta será complementaria a la que el grupo de energías renovables construirá en los terrenos de la antigua Alcoa, en el polígono coruñés de A Grela. En esa parcela, comprada por Resonac, producirán hidrógeno verde que ayudará a la productora de grafito a descarbonizarse y también será enviado a la factoría de amoníaco de Langosteira.

El proceso técnico

Los principales bloques en los cuales se estructurará la futura planta son los siguientes: producción de nitrógeno mediante un sistema de separación criogénica del aire, producción de amoníaco mediante el proceso de barcos compuesto de dos brazos, terminal de descarga de ferrocarriles y un sistema de almacenamiento de amoníaco presurizado. El proceso de obtención del nitrógeno implica una primera fase de compresión de aire para posteriormente producirse un enfriamiento y eliminación de las impurezas de la corriente de aire en un intercambiador de contacto directo. Posteriormente, el aire de proceso se enfría intercambiando calor con los productos extraídos de la columna de rectificación criogénica y finalmente en dicha columna de rectificación el aire frío se separa en una corriente de oxígeno y nitrógeno puro.

El proceso de síntesis de amoníaco se produce en una serie de fases, comenzando por una primera compresión del gas desde la presión de suministro hasta la presión requerida. Posteriormente, el gas de síntesis se transforma en amoníaco en el reactor de conversión en el cual se produce la reacción catalítica de Haber-Bosch. Este amoníaco se extrae del bucle de síntesis mediante el enfriamiento y condensación del gas procedente del reactor de conversión empleando en una serie de intercambiadores de calor presentes en el bucle de síntesis, agua del sistema de refrigeración y amoníaco refrigerante en diferentes fases. Finalmente, se lleva a cabo la separación del amoníaco líquido procedente del condensador y su recuperación como producto.