«Lo que más echo de menos es a mis padres, el olor y el ruido del mar»

Loreto Silvoso
LORETO SILVOSO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Instalada en Bruselas desde los noventa, en cuanto puede regresa a A Coruña

10 abr 2017 . Actualizado a las 11:02 h.

La física coruñesa Beatriz Yordi Aguirre lleva más de veinte años en Bruselas. Aunque regresa a casa a menudo, le gustaría que fuese más fácil llegar. De hecho, le gustaría que fuese «como en el libro de Cunqueiro, donde abrías una caja de mantecados de Astorga, tirabas de un hilo y llegabas a Mondoñedo».

-A falta de ovillo mágico, ¿cada cuánto viene por aquí?

-Los veranos tribales en familia son sagrados y, el resto del año, cuando puedo escaparme.

-¿Qué echa más de menos?

-A mis padres, a mis amigos y el olor y el ruido del mar.

-¿Orgullosa de sus raíces? Su madre es la famosa arquitecta Isabel Aguirre, directora de la Escola Galega da Paisaxe.

-¡Orgullosísima! Mi madre ha sido una mujer pionera. Se hizo arquitecta siendo nosotros adolescentes. Recibió el Premio Nacional de Arquitectura y el premio Wonenburger. Pas mal [No está mal], como dicen los belgas. Y mi padre ha sido un hombre innovador en seguridad en el trabajo, en una época difícil de importantes transformaciones sociales y laborales.

-Además de su padre, Antonio Yordi, hay que hablar de su tío, Luciano Yordi de Carricarte.

-Para muchos, mi tío Chano, como le llamábamos nosotros, fue un ejemplo de ingeniero de caminos. Diseñó la presa de Cecebre y muchas otras. Sin duda, un hombre innovador y rompedor.

Y déjeme seguir con mis hermanos Isabel y Antonio, que son admirables. Y Alain, mi marido, brillante. Y mi hija Lola, que apunta maneras de mujer magnífica. Tiene que pararme, que mi familia da para mucho y amenazo con empezar con mis amigos…

-Ja, ja... La paro, la paro. ¿Qué tal le sentó el nombramiento como directora de Mercados de Carbono?

-Estoy contenta y me siento halagada, porque es un dosier de gran responsabilidad en Acción por el Clima, que es parte de lo que llamamos Unión de la Energía, una de las prioridades de la Comisión Juncker. Me siento orgullosa como mujer, como gallega, española y europea.

-¿Contaba con ello?

-La selección de directores lleva tiempo y tiene varios exámenes. No me pilló por sorpresa, porque es un proceso largo, pero no esperaba conseguirlo.

-¿Cuáles serán sus funciones?

-Liderar el equipo responsable del mercado europeo de emisiones de carbono. Incluye desarrollar el mercado internacional, con socios como China, e integrar la política de cambio climático en una política de innovación, oportunidades y competitividad.

-En pocas palabras, ¿qué son los Mercados de Carbono?

-Una herramienta para incentivar la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en determinados sectores. El régimen de comercio de derechos de emisión pone un tope a lo que determinados sectores pueden emitir colectivamente, un límite coherente con nuestros objetivos en materia de clima. Por debajo de ese límite, quienes más emiten deberán adquirir derechos de emisión de quienes logren reducir sus emisiones, de modo que las empresas tienen un incentivo económico para invertir en eficiencia y lograr que sus emisiones decrezcan. Es una de las piedras angulares de la política europea de cambio climático.

-¿Hasta qué punto es preocupante que Trump haya anunciado que echa para atrás los planes de Obama en este sentido?

-Desde la Comisión hemos lamentado que EE.UU. derogue las medidas de la etapa Obama en materia de cambio climático. Ahora deberemos ver qué otras medidas prevé implantar el presidente Trump para alcanzar estos objetivos. La UE y otras grandes economías han confirmado que no van a dar pasos atrás en esta materia. No solo por una cuestión de seguridad global, sino por el crecimiento que genera.

«En Londres escuché prejuicios y estereotipos de muchos dirigentes»

La exitosa trayectoria de Beatriz Yordi ha estado centrada en innovación, energías renovables y adaptación al cambio climático.

-¿Cuál es la clave del éxito?

-Creo que habría que empezar por definir que es el éxito. Me temo que necesitaríamos una larga entrevista para tener una repuesta decente, pero le puedo decir tres cosas que practico: ser tenaz, disfrutona y echarle entusiasmo.

-¿Qué le diría a las mujeres que sienten encima el llamado «techo de cristal»?

-Ánimo y que crean en sí mismas. Todos, como sociedad, tenemos un papel importante en la ruptura de ese techo. No podemos seguir desperdiciando tanto talento. En los consejos de administración en Europa, las mujeres representan entre un 10 y un 14 %. Estuve hace poco en un curso de liderazgo en la London Bussiness School. Éramos 32 y solo 5 mujeres y créame que escuché prejuicios y estereotipos de muchos dirigentes.

-¿Cuál es el problema para que nos cueste tanto llegar arriba?

-Necesitamos una cultura de trabajo más abierta, flexible, moderna e igualitaria donde las mujeres puedan encontrar su sitio.