Talento local con Zeravica

A CORUÑA

cesar delgado

El hijo del hijo del famoso entrenador Ranko Zeravica forma la cantera del Santo Domingo

12 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

] Llegó a Betanzos en septiembre del año pasado. Dusan Zeravica lleva el deporte en la sangre y ahora trabaja reclutando a niños para la escuela de Baloncesto del club Santo Domingo. Su padre, Ranko Zeravica, fue un reconocido entrenador de baloncesto con un currículo en el que se incluyen el oro con Yugoslavia en los Juegos Olímpicos en Moscú 1980 y varios mundiales. Además, su madre, Zaga Simic, también ejerció como técnica en este deporte.

«Mi padre fue también entrenador del Barcelona y fichó a nombres como Chicho Sibilio, a Epi, a De la Cruz. Hizo debutar a Solozábal en un partido contra el Real Madrid cuando aún era un júnior», cuenta Dusan, que añade: «Herede de él el don de reconocer el talento. En Betanzos soy el responsable de reclutar a niños, algo que fue una idea de mi padre porque él veía a alguien por la calle y le abordaba porque sabía si esa persona tenía algo especial». Ahora él continúa los pasos de su progenitor. «No tengo vergüenza. Voy por la calle y si veo a un niño que pienso que puede ser jugador le pregunto si estaría interesado. Si me dice que juega al fútbol le digo que se ha equivocado de deporte», confiesa.

En el Vales Villamarín

Además de reclutar jóvenes jugadores por la calle Zeravica colabora con el Vales Villamarín .«Es un proyecto en el que trabajamos con los profesores de primaria y secundaria. Estamos con los estudiantes en los recreos y acudo también a las clases de educación física. Los llevamos a ver algunos partidos de la liga EBA y en los descansos les damos la oportunidad de jugar entre ellos una pachanga para que se motiven», dice Zeravica. «Me fijo en si tienen interés o si podrían engancharse. Es fundamental buscar el relevo generacional en los clubes porque si solo dependes de fichajes externos y de dinero al final no está garantizada la supervivencia. Hay que buscar en los alrededores, por eso además de Betanzos me muevo por Sada, por Miño y por todos los concellos próximos», señala.

De momento Zeravica confiesa estar muy contento con los resultados . «Los niños me conocen por la calle y me agradecen el haberlos llevado a practicar baloncesto. Algunos padres también, porque hay niños que a lo mejor no eran sociables y al empezar a jugar han hecho amigos. Otros incluso me piden consejos porque los chavales quieren dedicarse profesionalmente a este deporte y me preguntan qué escuelas son las mejores».

Además Dusan admite estar ilusionado por la buena acogida que el proyecto ha tenido en los centros educativos. «Los profesores del Vales Villamarín están entusiasmados con la idea porque quieren que los niños descubran otros deportes», dice. Tiene claro que es muy difícil desbancar al fútbol como deporte rey pero admite que cada vez el baloncesto gana más adeptos.