San Cristóbal, una plaza descuidada frente a un edificio emblemático

Emiliano Mouzo A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Marcos Míguez

Los vecinos y usuarios se quejan de la falta de limpieza del área de ocio, del mal estado de las zonas verdes y del mobiliario urbano

04 jun 2018 . Actualizado a las 10:59 h.

La estación de San Cristóbal, que fue concluida en 1935, es uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad. Es de estilo neorrománico y fue proyectada por el ingeniero Antonio Gascué Echeverría. Su diseño es singular y único dentro de la arquitectura ferroviaria de España. La única que se le asemeja algo es la estación central de Helsinki.

Frente a ella se diseñó una amplia plaza de más de 2.000 metros cuadrados, una zona de ocio que fue remozada hace unos cuatro años con una inversión de unos 460.000 euros. Cuenta con zonas ajardinadas, área de juegos para niños y es frecuentada diariamente por los vecinos, y suele ser también lugar de descanso para los viajeros que llegan con antelación a la salida de su tren.

Pues a pesar de que esta plaza está frente a un edificio icónico de la ciudad y que a ella acuden a diario multitud de personas «está hecha un asco», explica Diego Fernández, un empresario de la zona.

La mayoría de los usuarios y vecinos del área critican «la falta de limpieza de esta zona de ocio». Los bancos de piedra que circundan la plaza «están tan llenos de porquería que la gente ya ni los usa», manifestó Luis Roca, un jubilado que pasea a diario por la explanada y sube y baja las escaleras varias veces «para hacer un poco de ejercicio». Dice este hombre que él no se sienta en los bancos «porque estropearía los pantalones. Y tampoco te puedes apoyar en las paredes, que están negras», subrayó.

Además, los vecinos protestan por el deterioro y la falta de cuidado de las zonas ajardinadas: «Los servicios municipales vienen por aquí de pascuas en viernes y cuando los arbustos ocupan las aceras o parte de la plaza». De hecho, ayer se podía observar la basura acumulada en una de las áreas verdes anexas a la plaza: «No sé si pertenece a Renfe o al Ayuntamiento, pero esas botellas y esos plásticos llevan ahí más de cuatro meses», indicó Isolina, la propietaria de un negocio próximo.

Otra de las reclamaciones que hacen es por la falta de mantenimiento del mobiliario urbano: «Los bancos de madera están en un estado lamentable, al igual que las papeleras o las mesas que cuentan con grabados para poder jugar al ajedrez, a las damas o al tres en raya. Apenas se pueden ver los colores de estos mosaicos», indicó Diego Fernández. 

Vandalismo

Y a mayores de la falta de cuidados de la plaza hay que sumar los actos vandálicos que se producen en esta área de ocio. Los gamberros la tomaron con dos esculturas de bronce.

«Pintaron de negro, tanto las obras como los pedestales», señaló Marisol Seoane, una usuaria habitual. «Hemos llamado varias veces al Ayuntamiento y al 092, pero por aquí no viene nadie».