¿Tú también paseas por el párking?

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

CESAR QUIAN

22 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Coruña siempre ha tenido mucha vida interior, de todos son conocidos esos ríos de gente, esas aglomeraciones en los centros comerciales cada vez que llega una borrasca profunda en la que nos apelotonamos. Por no hablar de los refugios de los bares, siempre mucho más acogedores cuando cae el chaparrón y ese viento feroz que nos da la vuelta. Todos nos hemos cobijado en soportales y hemos aguantado los recorridos largos por la acera de enfrente del paseo marítimo cuando arrecia.

En esos caminos nos veníamos manejando esos días de lluvia que nos cogen desprevenidos. Pero de un tiempo a esta parte, hay otro interior que ha cobrado más vida: el paseo subterráneo por el aparcamiento. Hay más gente por abajo a hora punta, si me apuran, que por arriba. El párking ha cogido tal ambiente que, según me cuenta mi compañera María Vidal, a la que no se le escapa nada de esta Coruña, llega un momento en que los coches tienen que ir esquivando a los peatones que han decidido que ese recorrido abrigado tiene mucho más sentido. Sobre todo si no hay demasiado tiempo por delante. Así que no he perdido ni un minuto yo tampoco en ir a comprobarlo. ¡Mi madriña, qué cantidad de gente! Y eso que no me di el paseo en la plenitud de un Gisele, de un Hugo o de un Félix, que tiene que ser otra cosa. Con un buen tormentón el aparcamiento tiene un atractivo diferente y, cómo no, su gente: padres con niños con el uniforme de los colegios que están en el entorno de la plaza de Portugal, un montonazo de personas equipadas para ir a la piscina de la Casa del Agua, también runners que hacen su carrera por arriba, pero cuando empiezan a caer chuzos deciden hacer su regreso por abajo.

Y ya no se imaginan -o sí, por si lo han utilizado- el buen ánimo que se genera en esa autopista bajo tierra los días de fútbol. Eso sí que es digno de un reportaje, los kilómetros que se recorren los hinchas del Dépor de un extremo a otro para llegar al estadio en hora, y por supuesto, sin pelarse de frío. Es otro canal de comunicación, otra ruta que nos puede abrir un mundo de posibilidades. Y también de un estilo. Conocemos de memoria los modos del paseo por el Cantón, por la plaza de Lugo, y hasta por Marineda City. Ahora, además, habrá que empezar a analizar qué nos espera en ese párking que tiene un recorrido tan atractivo de punta a punta. Desde Esclavas a Salesianos los coruñeses hemos encontrado otro camino. Y por esas entrañas, no lo duden, también se socializa mucho. No sé cómo estará la cosa en el aparcamiento del Cantón o en el del Parrote, pero me da que el rollito está en este otro lado. Desen un paseo por el párking, es toda una sorpresa.