Vecinos de la parroquia oleirense de Nós alertan de los continuos choques en este punto de la N-VI y reclaman a Fomento una intervención definitiva
26 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Biona es en el concello de Oleiros el nombre de una fábrica de piensos, pero sobre todo el de la curva que se ha ganado a pulso fama de punto negro, negrísimo. «O día que chove é tremendo. Os coches van para ao despezamento. E un día vai haber unha masacre», asegura María Jesús Sánchez, una vecina que desde hace dos décadas vive al pie de este tramo de la N-VI y ha sido testigo de infinidad de siniestros, el último ayer mismo, cuando los vecinos fueron testigos de un choque entre tres vehículos que se saldó sin heridos. Y el sábado, un conductor perdió el control de su vehículo y chocó contra los bolardos de la vía. Como en ocasiones anteriores los daños personales fueron escasos, pero el frontal del coche quedó destrozado. «Dun tempo para aquí está sendo peor. Non só os accidentes, senón os derrapes dos coches», explica Miguel López Sánchez, hijo de María Jesús, quien ha decidido movilizarse junto con otros vecinos para exigir al Ministerio de Fomento que adopte una solución definitiva en un tramo en el que ya se intervino en el año 2010.
La obra de ampliación de la N-VI, que suavizó la curva de la vía en este punto, parecía ser la solución para la elevada siniestralidad de la zona, pero aunque los accidentes no son tan graves como en épocas anteriores, en las que se registraron víctimas mortales, la curva de Biona sigue siendo un problema grave, no solo para los conductores, sino también -y sobre todo- para los vecinos cuyas casas están al pie de la carretera y para los viandantes que transitan por los márgenes.
«Na nosa casa dúas veces chegaron a bater coches directamente contra a fachada e nunha desas ocasións bateu tamén na casa da nosa veciña», relata Miguel López. En ninguno de los casos había nadie ante las casas ni en la acera, pero de no ser así el resultado sería fatal. «O problema é das casas e da xente que vai a pé», dice María Jesús Sánchez.
Los vecinos de estas viviendas, ubicadas junto al desvío hacia O Batán, tienen previsto solicitar a la Guardia Civil de Tráfico un informe sobre los accidentes que se han registrado en el tramo en los últimos meses.
En el origen de los choques, que en muchos casos son frontales, se combinan varios factores, según los vecinos. Por una parte, las infracciones al incorporarse de un carril a otro, sobre todo en dirección A Coruña, cuando las líneas son continuas y esa maniobra está prohibida. «De cada tres coches, dous superan a liña continua», apunta María Jesús Sánchez. Otro factor que los residentes intuyen que puede afectar es que el firme en uno de los accesos esté resbaladizo a causa de la tierra existente en el margen donde se ubica la fábrica de piensos.
«Tamén pode ser que a xente ao principio ía con máis tranquilidade e agora conduce máis rápido», aventura Miguel López, quien cree que el problema podría solucionarse instalando una mediana hasta la altura del paso elevado para proteger las viviendas y evitar las maniobras prohibidas. La misma opción defiende el Concello de Oleiros, quien ayer expresó su total apoyo a las demandas de los residentes de Nós, a quienes está asesorando en su demanda ante Fomento.