Alvedro florecerá en primavera

fernando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

GUSTAVO RIVAS

El aeropuerto coruñés espera su recuperación con las nuevas conexiones

17 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Se confirma la tendencia a la baja que venía mostrando Alvedro en los últimos meses. Las cifras del mes de febrero hablan por sí solas. El aeropuerto pierde un 31,9 % de pasajeros con respecto a febrero del 2011, lo que supone un total de 51.954 usuarios registrados en el mes pasado. La única buena noticia viene del tráfico de mercancías, con un aumento del 9 % respecto del mismo mes del año anterior. Un dato que, aun siendo bueno, no resulta demasiado significativo para el aeródromo. Desde Alvedro se mira a las nuevas conexiones que llegarán en los próximos meses como tabla de salvación.

¿A qué se debe esta reducción de pasajeros?

Buscar las causas de los malos resultados del aeropuerto obliga a mirar en diferentes direcciones. Ya no vale escudarse en la consabida crisis y sus demoledores efectos sobre infraestructuras que dependen de la industria y su castigado entramado empresarial y de un muy afectado turismo. La crisis es común a todos los aeródromos, lo que ha provocado que no existan incrementos espectaculares de usuarios. Pero no todos han sufrido retrocesos semejantes. De hecho, y guardando las distancias entre uno y otro, Lavacolla tuvo un incremento del 5,6?% respecto a febrero del 2011. Resulta especialmente llamativo que el aeropuerto de Peinador haya registrado mayor tráfico de pasajeros que Alvedro, invirtiendo así la tendencia de los dos últimos años. A pesar de haber reducido en un 19,2 % su número de pasajeros respecto de febrero del 2011, Vigo se mantiene por encima de los 55.000, más concretamente con 56.370 usuarios.

¿En qué medida ha influido la desaparición de Spanair?

Sin duda uno de los detonantes de este descalabro es la desaparición de Spanair. De hecho, el descenso de pasajeros es semejante al número de usuarios de la aerolínea en febrero del 2011. La mayoría de las compañías aéreas que operan en Alvedro aumentaron, incluso, su pasaje, aunque fuese levemente, con la excepción de Air Nostrum y, por supuesto, Spanair. Las ocupaciones de los vuelos han registrado en muchos casos cifras más que aceptables. En cuanto a destinos, los vuelos a Lisboa aumentaron su ocupación respecto al año pasado, Barcelona supera el 80 % y Madrid le andaría cerca. Aunque, eso sí, no llegan a los límites esperados los vuelos a Londres -aunque se trata, en efecto, de un mal mes para esta conexión-, y Valencia, cuyos horarios no le favorecen.

¿Cómo afectará esta bajada al aeropuerto?

Aun quedando mucho tiempo para cerrar el año, los datos son alarmantes. Si se confirman las previsiones podría no llegarse al millón de pasajeros. En el pasado 2011, y a pesar de la pérdida de un 8 % en el pasaje, Alvedro registró un total de 1.012.800 viajeros. Una cifra que supone una barrera que va más allá de lo psicológico, ya que bajar de la misma podría traer graves consecuencias para el aeródromo. Los turoperadores podrían perder interés en trabajar en un aeropuerto que no asegura un volumen mínimo de negocio.

¿Puede cambiarse la tendencia?

La cosa, a priori, no pinta demasiado bien, pero habrá que esperar a los resultados que arroje la campaña estival. Hacer depender el éxito de Alvedro de su tirón turístico podría resultar demasiado osado, pero futuras conexiones podrían suponer un revulsivo suficiente para salvar la situación. Nuevos destinos como Estambul, la recuperación de Sevilla y Ámsterdam y los refuerzos y novedades que traerán desde compañías como Vueling o EasyJet son las cartas que jugará el aeropuerto para enderezar su rumbo.