Más allá de un bonito juego de palabras, Negroscurocasiclaro, define el sonido del álbum de debut de los coruñeses NOC. Se trata de una banda de rock recio, pero que en su interior esconde un claro instinto melódico. Según ellos es el resultado de ser unas orejas inquietas: «Juntamos el estilo de escuchar un poco de aquí y de allá», comenta Óscar, que se define como el más metalero del grupo:
«A mí, por ejemplo, el indie no es una música que me apasione, pero siempre hay algún toque de batería o de guitarra que te queda en el cerebro a la hora de componer».
Óscar es una de las cuatro patas de NOC, que completan Lex, Julián y, desde hace unos meses, Irra. Les precede un pasado duro, muy ligado al nu-metal y bandas como Incubus o Linkin Park. «Evolucionamos hacia una banda de rock y decidimos que teníamos que grabar un disco de manera profesional», explica Óscar. ¿Y la gente lo aceptó? «Lo mantuvimos en secreto, hasta que estuvo todo listo», comenta Julián. Pero gustó. «El primer concierto que dimos lo dimos en mi pueblo, en Ourense y hasta el más jevocho lo dijo: ??este mola más??», dice Óscar.
Si entonces se miraban a Incubus o Linkin Park, ¿cuáles son ahora las referencias sonoras? Les cuesta dar nombres, pero tras dudar Óscar se acuerda de Muse: «Los recuperé en los últimos años. Fui a ver su concierto de Santiago el año pasado y me parecieron impresionantes».
En este momento NOC están tocando en todos los lugares que los llaman -hoy actúan en la sala La Reserva de Carballo a las 22 horas junto a Dinero- y han llevado su música más allá de los escenarios. Por ejemplo, incluyeron un tema en el documental Los pájaros de la mina y sus canciones fueron el colchón de la campaña del Pacto Cívico.
Por ahora, siguen combinando como pueden su pasión por la música con sus obligaciones laborales. De hecho Lex, el vocalista, no pudo asistir a la sesión de fotos de La Voz.