El pulso de la ciudad María Ares opta a los premios Descartes, para trabajos de toda Europa, por un artículo en el que estudia el origen del sonido excepcional de los míticos violines
15 sep 2006 . Actualizado a las 07:00 h.?so es lo que para muchos caracteriza a los violines Stradivarius. María Ares fue un poco más allá y se planteó esa pregunta en el artículo La voz única de los Stradivarius, publicado en el suplemento Tercer Milenio del Heraldo de Aragón y que resultó galardonado con los Prismas Casa de las Ciencias a la Divulgación. Ahora acaba de ser elegido finalista en los Premios Descartes, convocados por la Comisión Europea para trabajos de todo el continente, junto con un libro del también coruñés José María Bermúdez de Castro. Su teoría: «Durante un período geológico determinado, las tormentas solares fueron menos frecuentes y los árboles crecieron con mayor lentitud, lo que permitió que se volvieran más densos, originando una madera excepcional. Esas condiciones no se volvieron a repetir». Ahora ya tenemos una explicación científica para un sonido que, con artículos o sin ellos, siempre ha sido celestial. Cita internacional, aquí al ladito ?ada inauguró ayer la octava convención anual de Asociaciones Americanas de la Península Ibérica (ALLAMO) con una recepción en el Ayuntamiento. En ella estuvieron presentes el agente consular de Estados Unidos en A Coruña, Marcelino Fuentes, el presidente de ALLAMO, Grahan Stanley, el presidente de la Asociación Americana de Galicia, Manuel Galán y el propio alcalde del municipio, Ramón Rodríguez Ares. Sada se convierte este fin de semana en una Europa en miniatura, porque en la convención participan agrupaciones de Portugal, Francia, Alemania, Suiza y Reino Unido. A lo largo del encuentro se incorporarán también el actual cónsul general de la embajada americana en Madrid, Chris Randall y el cónsul en Sevilla, Jerry Johnson. Ayer los asistentes al encuentro comieron en un restaurante y vieron un vídeo. Para que luego digan que las convenciones siempre son aburridas. ?ergio Cortés y Ana Belén Mellado llevan más de cuatro meses apostando por sacar adelante Ánser Hogar, una tienda de confección de estores, tapicerías o edredones ubicada en la calle Doctor Fleming número 4, en Betanzos. Actualmente disponen de seis máquinas, pero Sergio aspira a que «en el futuro podamos atender tanto producciones pequeñas como a gran escala». Dos rombos ?o es la identificación que se utilizaba en el franquismo en ciertos programas de televisión, sino algo bastante diferente: Ana Fernández inauguró ayer en el número 22 de la calle del Orzán una tienda de lencería en la que los clientes pueden hacerse también con juguetes eróticos y hasta con una línea corporal que, según afirma, ha hecho las delicias de unos cuantos: «Se llama shunga e incluye aceites, chocolate o polvos que se aplican con un plumero de plumas naturales». La inauguración tenía que ir acorde con la filosofía de una tienda que trabaja «la lencería francesa más exquisita», así que incluyó jamón de bellota cortado por un especialista. Y, por cierto, el escaparate de la tienda ya es motivo de fotos de móvil: «Es que el local está situado en una zona de copas y el escaparate permanece encendido hasta las cuatro de la madrugada».