El multiusos, con capacidad para 11.000 espectadores, se ha integrado en el circuito musical Grupos y solistas nacionales e internacionales han cosechado éxitos en el escenario coruñés
17 may 2004 . Actualizado a las 07:00 h.Desde aquel Ojalá que llueva café en el campo con el que José Luis Guerra marcó el techo histórico del Coliseo en agosto del 91, han caído otros 34. Las gentes bailaron entonces en gradas, rampas de acceso e incluso tras el escenario. Por seguridad, se decidió limitar a 11.000 espectadores la capacidad del multiusos coruñés. La plaza de toros y espectáculos de A Coruña celebra mañana su trece cumpleaños con 35 llenos absolutos. Un repaso a su corta historia sitúa ya al Coliseo coruñés como punto de referencia musical en giras nacionales e internacionales. Por él han pasado figuras de la talla de Sting, Elthon John, UB:40, Supertramp, Mark Knopfler, Deep Purple, Gloria Estefan, Van Morrison, Iron Maiden, Chayanne o Maná, por citar sólo algunos de los que colgaron el cartel de no hay entradas (los mexicanos lo hicieron tres veces). Junto a ellos, reventaron las taquillas los artistas nacionales más relevantes, como Alejandro Sanz, Mecano, Víctor Manuel y Ana Belén, Serrat, La Unión, Sabina o El último de la fila. En aforos más reducidos, el éxito acompañó a otros muchos intérpretes en el multiusos, por el que han pasado, entre otros, desde Montserrat Caballé hasta Frank Sinatra, Julio Iglesias, B.B. King o Ray Charles. Pero al margen de escenario musical, al Coliseo se debe la recuperación de la feria taurina, desaparecida en 1967, y la celebración de destacados eventos de muy diferente clase y condición. Desde oposiciones de convocatoria masiva hasta la Liga Europea de Baloncesto 91-92, cross, judo, esgrima, ferias o la gala de Miss España 91 tuvieron lugar en el recinto, que también acogió el espectáculo de David Copperfield, las macro-óperas Aida y Carmina Burana , el ballet de Joaquín Cortés o los shows de Les Luthiers. Con tanta afluencia e incluso espectacularidad hubo mítines políticos y desfiles de moda, algunos de ellos con récord incluido -la Gala de la Piel puso en 1994 a más de cien tops sobre el escenario- y el Coliseo ejerció incluso de templo para multitudinarias asambleas religiosas.