La mano de Rubén Albés como salvavidas del Lugo

Ignacio Meitín Buján
I. MEITÍN BUJÁN LUGO / LA VOZ

CDLUGO

OSCAR CELA

El joven entrenador vigués reflotó en siete jornadas a un equipo lucense con la moral por los suelos y hundido en la clasificación después de casi cuatro meses sin ganar

01 jun 2021 . Actualizado a las 16:33 h.

Volvió a acertar Tino Saqués con la elección del técnico para consumar otra épica permanencia en Segunda División. Como había hecho con Eloy Jiménez hace un par de temporadas y con Juanfran García el pasado año, el mandamás del Club Deportivo Lugo se inclinó por un entrenador sin experiencia en la categoría como solución de emergencia, y en Rubén Albés (Vigo, 1985) encontró de nuevo el ansiado salvavidas. En solo siete jornadas, el joven estratega olívico llevó a los albivermellos de la agonía al éxito. Y lo hizo con sutileza, sin demasiado ruido y sin necesidad de acometer una profunda metamorfosis en el estilo de juego. La mejoría defensiva y las continuas inyecciones de optimismo, autoestima y confianza al grupo fueron los ingredientes principales del cóctel que elaboró para resucitar a un plantel de jugadores que estaba a punto de bajar definitivamente los brazos después de casi cuatro meses sin festejar victorias. «Los futbolistas han hecho un trabajo increíble, pero no solo hoy [por el domingo]. Me encontré un grupo de buenos jugadores a los que la autoestima les hacía creer que eran peores, y el proceso y el trabajo ha sido cambiar la mentalidad y subir la confianza. Nada más», explicó tras la victoria en Vallecas que les dio la permanencia.

El desconocimiento de la categoría no fue un problema para Rubén Albés, que venía de cerrar una «enriquecedora» etapa en la liga rumana al frente del Hermannstadt y con una trayectoria en el fútbol español a la que daban lustre sus buenos resultados en el Eldense, el Celta B y el Valladolid B, y los meses como ayudante de Miguel Ángel Portugal en Primera División en el primer equipo de Pucela. Su mensaje caló en el vestuario albivermello y su perseverancia para encontrar el once tipo en tiempo récord lo llevó a componer siete alineaciones diferentes en las siete jornadas, si bien en Vallecas el único cambio de Canella por Luis Ruiz era obligado por la sanción de este último.

Solo tres intocables

Desde su amargo estreno ante la Ponferradina (2-0) hasta el ya histórico encuentro en Vallecas solo tres futbolistas no faltaron nunca en los planes de Albés para armar la mejor alineación. El central Federico Venancio, el medio Hugo Rama y el delantero Manu Barreiro fueron siempre titulares con el preparador vigués, mientras que los laterales Campabadal y Luis Ruiz se perdieron un único partido y en ambos casos por sanción. Su decisión más controvertida en todo este tiempo fue la apuesta por Alberto Varo en la visita del Zaragoza en lugar de un Ander Cantero que era indiscutible bajo los palos desde septiembre del 2019. Al siguiente partido le devolvió la titularidad y atribuyó la suplencia del navarro al descanso emocional.

La mejor media de puntos de los 12 técnicos que tuvo el equipo desde su vuelta a Segunda

Rubén Albés tomó las riendas del conjunto lucense a mediados del pasado mes de abril, en la jornada 36, días después de la dramática derrota en el Ángel Carro por 1-3 ante el Alcorcón que le costó el puesto a Luis César Sampedro, y en sus siete partidos al mando el Lugo cosechó 11 puntos -3 victorias, 2 empates y 2 derrotas-, los 10 últimos de manera consecutiva, un registro que le convierte en el entrenador más eficaz de los 12 que pasaron por el banquillo del Ángel Carro desde el regreso a Segunda División en el 2012. Su promedio es de 1,57 puntos por encuentro, ligeramente superior al de Juanfran (1,54) y por encima de los de Luis Milla (1,38), Mehdi Nafti (1,36) o Francisco (1,30), e incluso de Quique Setién, cuya media fue de 1,26 puntos en sus 126 partidos en la categoría de plata del fútbol español.