Tras un excepcional primer mes en el banquillo, sumando cinco victorias, un empate y una derrota, el nivel del equipo se resintió, sobre todo en ataque, bajando sus cifras anotadoras y manteniéndose a flote gracias a un gran rendimiento defensivo. En los últimos tres meses en Liga, Nafti solo consiguió dos victorias, nueve empates y cinco derrotas. La decisión de Tino Saqués ha obviado el buen trabajo inicial, valorando los últimos meses de competición -en especial el último-, donde dos puntos de quince acabaron sepultando al de Toulouse.
Un estilo defensivo, pero eficaz
No solo mejoró las cifras y estadísticas, Mehdi Nafti fue capaz de reanimar a un vestuario hundido por la marcha de Juanfran y sacar el máximo de todos sus futbolistas. Lo consiguió desde la solidez defensiva, erigiendo una muralla infranqueable, de donde el club rescató muchos puntos, mejorando ostensiblemente el rendimiento de jugadores como Venancio, Ander Cantero y jugadores más talentosos como Hugo Rama. No en vano, acumuló hasta nueve partidos sin encajar, la tercera mejor marca del equipo en la Segunda División.