Lazo, el gran protagonista ante el Elche, insiste en que la plantilla «no mira hacia abajo», y Josete valora el punto y lanza un capote a su entrenador
25 feb 2019 . Actualizado a las 19:29 h.Desde el vestuario del Ángel Carro siguen llegando mensajes de preocupación por los problemas para hilvanar victorias y, sobre todo, por el agujero defensivo que tanto está penalizando al equipo en los últimos partidos en casa. «Tenemos que solucionar esto urgentemente», avisó Josete Malagón al término del encuentro ante el Elche. Sin embargo, si de algo presumen los futbolistas del equipo rojiblanco después de cada tropiezo es de sus reservas de moral, ilusión y confianza. «Somos conscientes de dónde estamos, de quiénes somos y de que tenemos que remar todos en la misma dirección. Estamos unidos, la plantilla es una gran familia», añadía el central ilicitano en su comparecencia ante los medios después del empate (2-2) ante su exequipo, que valoró así: «Me quedo con lo positivo, el equipo ha sabido reaccionar en dos ocasiones».
Después de lamentarse por no haber podido precisar el cabezazo que se perdió rozando el larguero -«no era fácil, el balón traía mucha velocidad», dijo-, Josete expresó su total confianza en el trabajo de su entrenador, Alberto Monteagudo. ««El míster lleva más de 30 años en el fútbol y seguro que se ha encontrado situaciones así y sabe como enfrentarlas. Está capacitado más que de sobra», sentenció.
Su compañero José Carlos Lazo también encontró el lado positivo del empate ante un Elche que se adelantó en el marcador en dos ocasiones. El punto permite al Lugo estirar ligeramente su ventaja con los puestos de descenso, si bien el goleador rojiblanco cree que el premio pudo ser mayor. «Estoy feliz porque rescatamos un punto, aunque creo que en la segunda parte merecimos más», dijo. Y añadió: «Solo pensamos en ir hacia arriba, no miramos hacia abajo».