Doce días de intensidad y espera

M. Pichel LUGO / LA VOZ

CDLUGO

David Ferreiro, recortando a dos rivales en el primer partido de pretemporada.
David Ferreiro, recortando a dos rivales en el primer partido de pretemporada. Carlos Castro< / span>

Los primeros problemas físicos aparecen en la pretemporada del Lugo

28 jul 2014 . Actualizado a las 11:33 h.

Tanto jugadores como cuerpo técnico del Lugo han destacado desde que comenzó la pretemporada la importante carga de trabajo que Quique Setién y Fran Soto han preparado para la puesta a punto. No es para menos, teniendo en cuenta que, para los rojiblancos, los inicios de competición son un momento clave, en los que almacenar puntos de cara a épocas de sequía. Claro que la intensidad de este tiempo, de los doce días que han transcurrido hasta hoy desde que finalizaron sus vacaciones, se ha cobrado los primeros damnificados, por sobrecargas.

Eso sí, la lesión más importante, la de Iriome, hay que desmarcarla de la carga de trabajo. Y situarla en los imponderables de pretemporada, una caída en el partido contra el Celta B en Boqueixón. El resto es lo habitual cuando el ritmo es alto, para rellenar las baterías de cara a un curso tan largo como es el de la Segunda División A.

Máxima precaución

Setién no solo ha tenido que recurrir a los juveniles, sino que, por precaución, en los cuatro encuentros amistosos que ha disputado el equipo hasta el momento, ha dejado a varios de sus futbolistas profesionales en la grada. Desde los José Juan y Dani Mallo en el primero, a los Jon García, Jonathan Valle y Álvaro Peña (además de Luis Fernández), anteayer.

Y es que el entrenador reconocía que es mejor no arriesgar, a la espera de tener a los nuevos inquilinos que han de llegar antes del primer partido de la liga, el penúltimo fin de semana de agosto en casa del Murcia. El reparto de esfuerzos, de descansos, es una de las tareas de orfebrería en la que el preparador físico siempre hila fino. Una sobrecarga, un sobreesfuerzo, puede ser el preludio de un mal mayor: una lesión muscular. Por eso, la prevención, como se ha hecho con Luis Fernández, es el lema.