El Lugo ha mostrado dos versiones en sus últimos partidos fuera
25 abr 2014 . Actualizado a las 14:57 h.El Lugo tiene en El Molinón la opción de engancharse de forma definitiva a la lucha por el tren de la promoción de ascenso. Ese al que ya se subió en largas fases de la temporada. Fuera de casa no le han acompañado los resultados últimamente, apoyado en su tiranía en el Ángel Carro. Como visitante, ha mostrado en estos últimos tiempos dos caras: una vistosa, y otra más conservadora, para dos derrotas seguidas. ¿Cuál relucirá en el feudo sportinguista?
Posesión
Arma fundamental
El Lugo, sobre todo fuera de casa, viste un estilo distinto. Un equipo que arriesga menos, que espera y se lanza al contragolpe, y que, pese a no tener la posesión, su arma fundamental, sí ha dado sensación de controlar los tiempos. No se ha sentido tan incómodo sin ella. Sin embargo, en Murcia, su último partido fuera, o en Córdoba, donde despertó a tiempo de arañar un empate, los papeles cambiaron. El Lugo no estuvo cómodo ni con, ni sin balón, a merced siempre del rival, y con un José Juan salvador. La contrapartida se vivió en Sabadell, donde recibió un tempranero gol y se convirtió de principio a final en un torrente creativo.
Ambición
A por todas desde el inicio
No se ha arredrado el Lugo ante los rivales con más nombre. Y tiene la opción de demostrarlo una vez más mañana en El Molinón. Con la mejor versión de sus hombres de ataque, puede provocar nervios en una de las que se consideran partes más débiles del equipo local, la defensa. Setién ha confiado en estos últimos partidos en jugadores que le han respondido arriba: desde Rennella, pasando por Sergio Rodríguez, un Iago que llega al final de curso en un estado de forma sensacional o un incisivo Pablo Sánchez. Todos han mostrado su querencia por atacar, por salir a dominar los partidos, a por todas desde el inicio.
Atención
Cuidado en el balón parado
En la primera vuelta, el Sporting le marcó dos goles al Lugo a balón parado. Es una de las armas con que mejor se desenvuelve Los lucenses han mejorado desde entonces en su contención, limitando riesgos. Si, como se especula, Scepovic y Lekic comparten titularidad arriba, y si a ello se suman los centímetros del central Bernardo, los de Setién deben prestar especial atención en las opciones locales de juego directo, y en faltas y córneres. Los centrales, o un Víctor Díaz convertido en baluarte, tendrán trabajo a destajo para minimizar los riesgos.