La lesión del jugador franquicia del Lugo esta temporada, Enzo Rennella, baja por un mes, como consecuencia de una rotura fibrilar, va a empinar la cuesta de noviembre para los hombres de Setién. Los seis goles del italo-francés en la Liga tuvieron una aportación decisiva en la consecución de esa segunda plaza que, sorpresivamente, está ocupada por el equipo rojiblanco. Pero para que esta coyuntura fuese una feliz realidad, por ahora, hay que complementarla por la prologada imbatibilidad de la meta lucense durante siete de las doce jornadas transcurridas. He ahí el imprescindible equilibrio existente en el equipo rojiblanco para dar una respuesta real a esta insólita clasificación. Es más, el punto conquistado en Mallorca ha surgido del perfecto repliegue exhibido por el cuadro lucense en Son Moix, en contraposición con la nula capacidad ofensiva (ni un solo remate a la meta de Miño en 90 minutos).
¿En qué medida le puede afectar al Lugo la ausencia tan prolongada e inoportuna de su mejor artillero, precisamente coincidiendo con la empinada cuesta de noviembre? Sin duda, esta ausencia llega en el peor momento del calendario. ¿Tendrá Setién alguna carta guardada en la manga? La pasada campaña surgió el milagro de Óscar Díaz como sustituto del ariete Mauro Quiroga, víctima de una gravísima lesión. Se va a poner a prueba la verdadera capacidad del fondo de armario existente. Y es todo un desafío para los otros dos delanteros, Sandaza y Juanjo.
A todo ello, existe la firme decisión del director deportivo de gestionar varios refuerzos para el mercado de invierno. Desde luego, con la firme convicción de fichar jugadores que mejoren a los que hay. Y se quiere empezar esta difícil misión por la parte de la delantera. Para ello, Mouriz no va a esperar a enero para verse sorprendido por los acontecimientos. En su agenda figuran varias entrevistas y algún viaje próximo al extranjero para avanzar las gestiones. No se quiere dejar nada al azar. Y en eso anda...