FÚTBOL / SEGUNDA B
03 sep 2001 . Actualizado a las 07:00 h.Frío y seguro. En ningún momento del partido ante el Athletic B dio muestras de flaqueza. Al contrario, el joven portero Adrián transmitió sensaciones muy positivas en su debut en Segunda B. «Me encontré muy a gusto, pero lo que más me sorprendió fue la sensación de tranquilidad que experimenté en el campo», comenta el guardameta. La intervención de Basadre, justo antes de que saltase al césped fue crucial, y así lo narra Adrián. «Durante la semana estuve un poco tenso, pero llegué al campo y Víctor me cogió y me dijo: ««Sonríe un poco»». Y ahí se acabó el nerviosismo», dice el protagonista del domingo en el Ángel Carro. No sólo consiguió que no se echase en falta al sancionado Carlos, sino que mantuvo la puerta a cero, objetivo de los cancerberos. Se mostró seguro en los balones aéreos, solventó con eficacia varios unos contra uno, y lo más importante, contagió serenidad y transmitió confianza a sus compañeros. «Me sentí como si estuviera jugando con los juveniles, incluso mejor», sostiene entre risas y más suelto que otros días. «Estos días la prensa me acosó un poco y no estaba acostumbrado», afirma Adrián, que cumple su segundo año en el club rojiblanco. Renunció al Deportivo A sus 18 años, y tras un efímero paso por las categorías inferiores del Dépor, Adrián aún tiene por delante toda una vida en el fútbol. Este coruñés, formado en el Orillamar, jugó en los juveniles del Dépor un año, tras el cual decidió cambiar la camiseta blanquiazul por la rojiblanca. La temporada pasada jugó en el División de Honor del Lugo, y ésta dio el salto al primer equipo, a pesar de una suculenta oferta del Salamanca, que ofreció cuatro millones por su traspaso. A pesar de su juventud y de la gran actuación ante el Athletic, Adrián tiene los pies en el suelo. «No puedes dejar que te metan pajaritos en la cabeza, y aunque parezca un tópico, yo sólo pienso en el entrenamiento de hoy», dice el portero, consciente de que será difícil tener muchas oportunidades como las del pasado domingo. «Por ambición no será, pero Carlos tiene mucha experiencia y será complicado desbancarlo de la titularidad», añade Adrián, que de momento le dará que pensar a Basadre.