El Concello abre expediente de derribo de un galpón en la Gran Vía de Carballo

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Basilio Bello

Ordena al dueño parar las obras bajo amenaza de multa de 1.000. a 10.000 euros

31 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Carballo ha ordenado a un vecino paralizar las obras en un galpón bajo amenaza de multa de 1.000 a 10.000 euros. De forma paralela, le abre expediente de reposición de la legalidad por la construcción de un anexo en una propiedad situada a la altura de los números 66-68 de la céntrica Gran Vía.

En octubre del pasado año, un vecino solicitó permiso para la colocación de teja sobre una cubierta de fibrocemento en una construcción ya existente. Sin embargo, todo apunta a que los trabajos realizados distan mucho de lo indicado en el permiso. Una vecina, cuya propiedad linda con este anexo, denunció una posible irregularidad urbanística el 17 de diciembre. Alegó en su escrito al consistorio que en realidad lo que se estaba acometiendo era la construcción de una nueva edificación, en sustitución de otra ya existente. Que esa nueva actuación carecía de licencia municipal y que tocaba con el cierre de su finca. Además, la denunciante esgrimió que, según las normas urbanísticas, y en lo que a ese tramo de la Gran Vía se refiere, está «prohibido construír a más de 30 metros de la calle». Por todo ello solicitó una inspección de la obra y reclamó la paralización de la misma al entender que es ilegal.

El Ayuntamiento emitió una resolución el pasado día 2. El responsable técnico deja claro que las obras realizadas carecen de licencia municipal. Que se trata de una edificación auxiliar sobre una base de hormigón armado, con vigas prefabricadas y cubierta, con huecos para la colocación de puerta y ventanas. Las dimensiones de la planta son de ocho metros de largo por tres de ancho y 1,80 de altura. Este inmueble se levantó sobre otra construcción anterior que había sido derribada. La parcela en cuestión no tiene frente a la vía pública y se sitúa en la parte posterior de un edificio con frente a la Gran Vía. Y todo indica, según la tipología de la vivienda, que se trataría de un anexo para hacer vida en su interior. Desde el consistorio sí confirmaron que el dueño había solicitado «comunicación previa» el 10 de octubre del pasado año «para colocación de tella sobre a cuberta de fibrocemento dunha construción existente», que fue derribada para levantar en su lugar otro inmueble cuyas características se asemejan más a un fin de semana.

Paralización de los trabajos

A la vista de todos estos datos, el Ayuntamiento ordenó «a paralización inmediata das obras» y en caso de no atender a este requerimiento, el promotor se enfrenta a multas de entre 1.000 y los 10.000 euros «reiterables ata acadar o cumprimento da orde de paralización». De forma paralela, se le incoa expediente de reposición de la legalidad urbanística «polas obras realizadas sen título habilítante na rúa Gran Vía».

La denunciante, que prefiere mantener el anonimato, dijo que, pese a la orden de paralización decretada por el consistorio, «hai xente traballando no galpón». También aseguró haber recibido «insultos» por parte del promotor cuando este tuvo constancia de la denuncia elevada ante el Ayuntamiento el pasado 17 de diciembre. Ahora, tanto el denunciado como la denunciante tienen un plazo para presentar las alegaciones que estimen oportunas a este recurso de incoación de expediente.