Los plumachos ya son parte del paisaje vegetal de la Costa da Morte

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Ana Garcia

CHEQUEO | La hierba de la Pampa ya crece en algunos solares del casco urbano de Carballo. No son, desde luego, los únicos espacios que han tomado

19 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La invasión de los plumachos o hierba de la Pampa es lenta, pero imparable. Ya hay ejemplares vigorosos en el centro de Carballo, en concreto en algunos solares sin uso, como uno en la calle Carlos Casares, entre el Pazo da Cultura y la Praza da Cruz Vermella. Pero también todo alrededor de la localidad y en las cunetas de numerosas carreteras. Destacan, sobre todo, en el polígono de Bértoa, en la parte ampliada. Hace dos años, la presencia de los plumachos era espectacular. Ya no lo es, pero no porque la plaga haya remitido gracias a la lucha contra ella, sino porque también ha sido espectacular el crecimiento de las naves industriales.

Zaira Pallas

Y lo sigue siendo: no había más que darse un paseo para ver lo que se ha levantado y lo que está en marcha. Pero también hay plumachos en algunas parcelas de la primera fase del parque empresarial, incluso con actividad. Y, por supuesto, también en otros parques como el de Buño, aún vacíos, y a pesar de las limpieza que se han llevado a cabo.

La colonización es muy efectiva (más que la uña de gato, por ejemplo), porque el viento esparce sus semillas, y además no acaba de ser vista como una especie invasora, ya que incluso se toma como planta decorativa, ya desde los tiempos en los que solo se veía crecer en las medianeras de las autopistas.

Fuego contra las raíces y fuertes multas en As Mariñas

De momento, la presencia de plumachos (Cortaderia selloana) en la Costa da Morte se ve con indiferencia, pero en otras zonas de Galicia llevan mucho tiempo declarándole la guerra. Particularmente en la comarca de As Mariñas, donde Oleiros lidera esa batalla. Hace tres años, de una manera tan llamativa como efectiva, con un incendio controlado en un punto de máxima concentración, pero el rebrote fue aún peor. Ahora, el alcalde, Ángel García Seoane, tras reconocer que esa experiencia no fue buena, pide que se arranquen las plantas, con cuidado además de no esparcir las semillas. Y no habla en broma. Hace unas semanas, el partido que sustenta la alcaldía de Oleiros, Alternativa dos Veciños, contrataba media página de publicidad en este periódico con el mensaje: «Os plumachos seguen a invadirnos. Elimínaos para que non se espallen. A flora e fauna de Galicia está en perigo». Además, el pasado marzo hubo sanciones de mil euros a tres propietarios por no eliminar estas plantas de sus fincas. No solo Oleiros, porque en Miño también aplican una normativa sancionadora exigente, a mayores de la campaña de concienciación. Las multas pueden oscilar entre los mil y los 10.000 euros. Por otro lado, ambos concellos reclaman a otras Administraciones que hagan lo propio en zonas de su competencia, por ejemplo junto a las autovías, autopistas o líneas ferroviarias.

Zaira Pallas