El centrocampista ourensán de 24 años ha sido la primera incorporación Bergantiños en este mercado invernal
10 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La Segunda Federación regresará el domingo a As Eiroas con un Bergantiños-Guijuelo (16.00) en el que los aficionados rojillos podrían gozar ya de la última incorporación del equipo de Carballo: Tiago Rodríguez (Ourense, 2000), que cumplirá los 25 años en el mes de julio. Es hijo del mítico Pichi Rodríguez Alonso, que disputó la Segunda División con el Salamanca y el ya desaparecido CD Ourense. Formado en el Celta, donde coincidió en varios éxitos con David Álvarez y Jorge Cuesta, creció luego en la UD Ourense y el Ourense CF antes de dar el paso a Primera Federación con el Arenteiro, con el que el curso pasado tuvo mucho protagonismo, a diferencia del presente.
—¿Cómo se abre la puerta del Bergan?
—Este verano hubo cambio de entrenador y lo cierto es que apenas jugué, llevaba muy pocos minutos. Yo me encuentro bien y noto que puedo dar más de lo que estaba dando, así que busqué una salida en forma de cesión. No me importó bajar una categoría porque yo quería algo que me motivase y ahí apareció el Bergan.
—¿Tuvo claro el destino?
—Yo sabía que la Segunda Federación acaba pronto, por lo que necesitaba un equipo en el que la adaptación fuese rápida. Eso aquí lo tenía por varios factores, y eso influyó. Vivir aquí, al lado de donde entreno pero sin estar muy lejos de casa también ayuda.
—¿Le llamó Jorge Cuesta?
—Sí, hablé con él antes de fichar. Lo tuve de entrenador cuatro o cinco años en el Celta, en donde también coincidí con David durante las etapas de cadete y juvenil. Por lo que sé del equipo y su estilo, además de escuchándolo en las ruedas de prensa, veo que no ha cambiado mucho.
—En la cantera del Celta empezó siendo un mediocentro posicional y, con el paso del tiempo, ha pisado posiciones más avanzadas.
—Sí, en Vigo yo me formé siempre como un seis de toda la vida. Pero ya en el Ourense CF, sobre todo en la Segunda Federación empecé a jugar un poco más adelantado y en los últimos años partí incluso de alguna banda. Donde más cómodo estoy ahora es en una posición intermedia, acompañando al pivote y pudiendo llegar arriba.
—Entrenó ya el miércoles ¿Qué tal los dos primeros días?
—Bien, muy bien, cogiendo sensaciones y conociendo un poco más a los compañeros, aunque a la mayoría ya los conocía de jugar contra ellos en Tercera y Segunda. Además, con Cristian Moreno también coincidí en el Ourense CF.
—Por su experiencia en la categoría... ¿Para qué cree que está capacitado este Bergantiños?
—Es que la Segunda Federación es imposible de predecir. Puede sonar a tópico, pero es tan igualada que al final es el propio equipo el que se va marcando el objetivo dependiendo como pasen las semanas. Si ganas dos partidos, de repente, te ves ahí en promoción de ascenso. Y pierdes los dos siguientes y te vas para abajo. Aquí puedes ganar y puedes perder contra cualquiera, pero veo nivel para asegurar la permanencia, que es lo principal.
—Por ahora, como futbolista sénior ha cosechado éxito allá donde va ¿Cuales cree que son las claves?
—A ver, depende de muchas cosas que al final te salga bien o no la temporada. Pero más allá de lo meramente deportivo creo que es clave tener un buen vestuario, y he tenido la suerte de disfrutar de eso siempre. Y aquí también lo parece. Es el día a día el que va a marcar si consigues los objetivos o no y para eso hace falta un muy buen ambiente e ir todos a una. Después, en el campo, está claro que en esta categoría no te puedes confiar contra nadie. Ni aunque vengas de ganar dos partidos y juegues contra el último.
—¿Está preparado ya para debutar el domingo si el míster así lo considera?
—Sí, estoy preparado para lo que me necesiten. Vine sin ninguna molestia y me estoy muy bien.