Los rojillos no pudieron contra el Rápido de Bouzas en un duelo entre favoritos
20 sep 2023 . Actualizado a las 20:55 h.El Bergantiños se estrenaba con aires muy renovados en partido oficial en As Eiroas y el resultado acabó por ser el de siempre. Desde el 2020, el club carballés solo había ganado 18 de los 48 encuentros ligueros disputados en su feudo y el comienzo de la nueva etapa no rompió con esa mala tendencia. Fue, además, uno de esos días de la marmota, que parecen ya vividos y en los que el Bergan acaba mereciendo más de lo cosechado.
Secho Martínez apostó de salida por un once continuista con el que había sacado en Viveiro, con los únicos cambios de Remeseiro y Pedrosa, lesionado, por Kanouté y Cano. El rombo en el centro del campo lo coronaba un Álex Ramos que fue el mejor sobre el verde y que pronto tuvo que desplazarse a la banda, pues antes del minuto 5, Cano se unía a la nómina de lesionados que ya cuenta con Pedrosa o Longo, quedando Musy como único delantero del equipo. Secho dio entrada entonces a Remeseiro, que junto a Ramos se situó más cerca de la finalización que de la creación.
Pero los que ocuparon el área rival durante los primeros minutos fueron los visitantes, con Cellerino como hombre más peligroso. Un cabezazo de él, que se marchó rozando la cruceta, despertó al Bergan y tornó la balanza gracias al control de la posesión, la presión adelantada y un juego muy rápido. A la media hora, Isra, muy activo por banda derecha, puso un gran centro que Remeseiro no fue capaz de rematar bien. El rechace le cayó a Musy dentro del área pequeña, pero su disparo se fue muy alto. El ex del filial del Valencia encaró al exbergantiñán Brais Pereiro poco después, pero el regate se le fue muy largo. Manu Núñez tuvo la última antes del descanso con un disparo desde la frontal que el meta visitante tuvo que enviar a córner.
El dominio del Bergan se mantuvo tras el paso por vestuarios, sobre todo gracias a la buena relación que ya han entablado en la banda izquierda Cabarcos y Ramos. Este último creó la mejor ocasión del encuentro con un pase en largo de 50 metros que Remeseiro acabó rematando con un disparo demasiado centrado tras una larga carrera. El Rápido de Bouzas intentó reaccionar y Canedo salvó el 0-1 después de un disparo raso desde el punto de penalti. En ese momento, el juego ya era un toma y daca continuo. A quince minutos del final la tuvo Isra tras una hermosa jugada combinativa de los locales, pero apareció Arán para mandar a córner. Al instante, Cellerino se quedó solo ante Canedo, pero el carballés aguantó bien al ex del Celta.
En los últimos compases los visitantes firmaron el empate, mientras que los rojillos intentaban derrumbar un muro que rara vez lograban penetrar. En el descuento aún se salvaron tras dos saques de esquina en los que a punto estuvo de llegar el 0-1. Sigue el atasco en As Eiroas.
FICHA TÉCNICA
BERGANTIÑOS (0): Santi Canedo; Isra, Iago López, Iago Martínez, Cabarcos; Kanouté, Mnau Núñez (David Álvarez, minuto 79), Álex Lorenzo, Álex Ramos; Cano (Remeseiro, 11) y Musy.
RÁPIDO DE BOUZAS (0): Brais Pereiro; Carlos, Arán, Cristian, Aitor Aspas (Xián, minuto 52); Kopa, Noel Diego Diz, Álex Rey (Kiko, 83); Cellerino y Youseff (Martín, 93).
ÁRBITRO: Zulema González (Ourense). Amonestó al visitante Cristian y a los locales Isra y Musy.
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la jornada 2 de la Tercera Federación, con unas 250 personas en As Eiroas.
«É un camiño longo e temos que seguir crecendo»
Tras el partido, el entrenador del Bergantiños Secho Martínez atendió a las preguntas de La Voz. El preparador sonense estaba contento de que «moitas das cousas adestradas vanse vendo nos partidos» y de que «fora un encontro máis similar ao que queríamos nós que ao que quería o Rápido de Bouzas». Lamentó «non ter concretado as oportunidades que creamos», pero resaltó que «é un camiño longo e temos que seguir crecendo, dándolle moita importancia a que todos teñen que sumar, sexa dende o banco, dende a grada ou dende o campo, e iso estamos conseguíndoo».
Sobre la posición de Remeseiro, más adelantada de lo habitual en los últimos cursos, señaló que «aí, entre liñas, ten que ser determinante».