Enrique Labarta Pose

francisco romero lema

CARBALLO

Artículo del erudito baiés Francisco Romero Lema, publicado en La Voz el 7 de septiembre del 63

23 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Enrique Labarta Pose nació en Bayo el 22 de julio de 1863. Era farmacéutico su padre, Francisco Labarta Raña. Su madre se llamaba Ramona Pose Martínez, y descendía de los Condes de Andrade, poderosos señores de la Edad Media. Enrique recibió la instrucción de primeras letras en el Colegio Rubido, de Santiago. Ingresó luego en el instituto, y terminado el Bachillerato pasó a la Universidad para cursar la carrera de Leyes, licenciándose en 1884, En 1885 publica su primer libro: «Noventa y nueve céntimos de versos». Y en ese mismo año contrae matrimonio con doña Elisa Martínez del Río, estanquera en Santiago.

Enrique Labarta trabajó como abogado en Bayo, pero pronto se trasladó a Santiago donde funda en 1888 la Revista Galicia humorística, que obtiene gran éxito. En 1889 ingresa como oficial de Hacienda, destino que le consigue Eduardo Vincenti, a quien Labarta muy agradecido, dedica el libro de versos, en gallego y castellano, Bálsamo de Fierabrás, prologado por Alfredo Brañas.

En 1890 funda en Santiago la revista Pequeña Patria. En 1892 se traslada a Pontevedra, y en este año publica Poesías premiadas, folleto en que se contienen Un café flamenco en Galicia, A mi aldea y Sátira de costumbres contemporáneas, composiciones que habían obtenido premio en el certamen literario de Pontevedra el 15 de agosto de 1892.

Labarta sentía hondo afecto por el pueblo donde nació, y esto está bien patente en la poesía A mi aldea, donde se leen estas estrofas:

«Feliz quien nunca ha visto más horizonte / que el que allí se divisa de una mirada/ un pedazo de cielo y otro de monte, /cuatro casitas blancas y una cañada./ Oh mansión de venturas, risueño nido / de tu adorado seno, yo ver quisiera / en un rincón, oscuro, desconocido, deslizarse tranquila mi vida entera!/ Cuando hacia mí la muerte tienda su mano / y el término señale de mi camino, / ¿En qué remotos climas o mar lejano descansarán los huesos del peregrino? / Así que aclare dudas tenebrosas / y después del postrero de mis momentos,/ más que artísticas tumbas, labradas losas, / de mármoles sepulcros o monumentos, / para mi humilde cuerpo, mi alma desea/ un rinconcito oscuro, muy solitario, allá en el cementerio que hay en mi aldea, / al protector abrigo del campanario.

Más publicaciones

En 1893 funda la revista Extracto de Literatura, de la que salieron cuarenta y tres números. En 1894 publica Pasatiempos, revista con formato de pequeño folleto de la que solo salieron cuatro números. Tenía ilustraciones y estaba redactada enteramente por Labarta. En 1896 publica Millo miudo, libro de versos en gallego. En 1897 funda la revista ilustrada Galicia Moderna, de gran mérito y muy difundida.

En 1899 le ocurre un suceso desagradable. Regresaba un día a Pontevedra, y al bajar del tren es detenido por un hombre, viajero en el mismo tren, que le acusaba de haberle robado la cartera. Ante las protestas de inocencia de Labarta se fue convenciendo aquel señor de que debía ser otro el delincuente. Y en efecto, poco después eran detenidos los autores del robo. Con motivo de este suceso escribe una graciosísima composición titulada Yo, carterista.

En 1900 escribe el apropósito El carnaval en Pontevedra en 1900, que se representa en esta ciudad con música del compositor Puga. En 1902 asciende a oficial tercero, gracias a la protección de Eduardo Iglesias Añino, a quien dedica el libro Adormideras, que vio la luz en este año. En 1904 publica un folleto en que se contiene A festa da Patrona de Tabeirón, que había sido premiada en el certamen celebrado en Pontevedra en agosto de 1903. En 1905 publica Cuentos humorísticos, en prosa.

Trasladado a Barcelona en 1904, se encuentra en Burgos en 1905, de donde se traslada a Valladolid y luego a Barcelona. Se encuentra en Orense hacia 1911 y en Toledo en 1912, de donde pasa a Barcelona en 1913. En 1919 viene a La Coruña y en 1920 se traslada a Barcelona. Resulta que Labarta vivió fuera de Galicia desde 1904 hasta 1925 salvo dos breves paréntesis: uno en Orense hacia 1911 y otro en La Coruña en 1919-1920.

Desde 1905 no publica ningún libro, pero sigue colaborando en revistas de España y de América hasta 1908. Los años intercalados entre esta fecha y 1917 son los más infecundos, pero de este tiempo es su hermosa composición A una estrella, que obtiene premio de honor en el certamen de Pontevedra de 1912. En 1917 empieza a colaborar, aunque de raro en raro, en el periódico Ideal Gallego de La Coruña. Aquí publica O río Lérez, entre otros.

Escribió para el teatro, además del apropósito Carnaval en Pontevedra en 1900, el sainete Unha boa misa, y las zarzuelas Al planeta Marte y El Alcalde de Matalarrana.

Desde 1888, fecha de publicación de Galicia humorística, hasta 1908 en que publica el poema, dedicado a Curros, Morreu o poeta, disfrutó de gran fama y extraordinaria popularidad en Galicia. Después esta popularidad fue decayendo por haber vivido casi siempre fuera de Galicia, porque no reeditó sus libros ni publicó otros nuevos y porque escribió poco en esta última época de su vida.

Un gran triunfo de Labarta fue el conseguido con su Oda a la Libertad, en el certamen celebrado en Barcelona en 1904. Se le concedió el premio de honor, disputado por los 211 poetas que concurrieron a dicho certamen. Es también de mérito relevante la Oda a Don Quijote de la Mancha, la cual fue leída por el autor en el acto de Burgos en 1905, con motivo del tercer centenario de la publicación del inmortal libro cervantino.

Sus poesías Unha corrida de toros en Noya, O gaiteiro de Bayo, Canto a Pontevedra, A festa de Tabeirón, N’hay millor vida que a do labrego, Morreu o poeta, O río Lérez y A Santiago de Compostela, están entre las mejores con que cuenta el Parnaso gallego.

Es un gran poeta festivo, pero es también un buen poeta sentimental y aun de tonos elevados y solemnes. Sus notas características son: la ingeniosidad y la gracia, la ironía, la ternura y delicadeza, la fluidez de la forma y la transparencia del pensamiento.

Estaba dotado de alta inspiración, y si verdaderamente se lo propusiera, hubiera dejado una obra más abundante y más selecta. Fue oficial cuarto de Hacienda desde 1889 hasta 1902. En ese año ascendió a oficial tercero, progresando después algo más rápidamente en ¡a carrera. En sus últimos años era jefe de Negociado de segunda.

En 1925, en el descarrilamiento del ferrocarril de Las Planas, ocurrido el 9 de abril, resultó herido, y fue llevado al Hospital Clínico de Barcelona. Falleció el 13 de mayo, después de habérsele sometido días antes a una intervención quirúrgica. Contaba 62 años no cumplidos. La Prensa de Galicia deificó grandes elogios a su labor literaria.