Corcubión rechaza la pérdida de los juzgados y de su identidad

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

CARBALLO

Marcos Rodríguez

Medio millar de personas se concentraron contra la reforma Gallardón

27 jun 2014 . Actualizado a las 07:10 h.

Medio millar largo de personas, prácticamente un tercio de la población de todo el municipio, se concentraron ayer frente a los Juzgados de Corcubión para oponerse de manera frontal a la pérdida de este servicio, que forma parte de la identidad del pueblo desde hace siglos y tiene un importante impacto en su configuración económica y social.

Convocados por el BNG y la CIG, con apoyo expreso del gobierno local del PSOE, los vecinos, a los que sumó gente de otros puntos de la comarca, formaron una densa columna humana en todo el espacio libre de la carretera desde la Capitanía Marítima hasta más arriba de la sede judicial.

En el colectivo estaban todos los concejales del gobierno, los del BNG y también representantes del PP, como el edil Luis Abelleira, además de los alcaldes de Carnota, Ramón Noceda, y Muxía, Félix Porto, o miembros de la corporación de Cee, como Serxio Domínguez o Plácido García, entre otros muchos cargos públicos.

El encargado de tomar la palabra fue el exrregidor nacionalista, Rafael Mouzo, quien recordó que «en Corcubión impártese Xustiza dende a Idade Media» y detalló los servicios públicos que «xa desmantelaron» en la localidad y los que «pretenden liquidar o próximo ano» como Hacienda. Acciones todas ellas enmarcadas dentro de la política de recortes perfectamente diseñada por «unha mafia organizada e unha fábrica de parados», como es el Gobierno, que con el «sometemento escandaloso» de la Xunta, quiere «facer dos xuíces monaguillos do poder». Una situación ante la que dice «que non pensen en Madrid que o pobo vai calar».

Entre gritos de «Gallardón dimisión» y «Corcubión partido xudicial» que se oían a su alrededor, el alcalde, Francisco Javier Lema, admitió que el informe del CGPJ, en apoyo de la propuesta por el ministro es un varapalo, aunque tampoco esperaba otra cosa, «só faltaría», dada la politización del órgano. Sin embargo, para él, lo más sangrante es que «Feijoo non dixo absolutamente nada» y que en el Parlamento gallego «nin se ocupan» del caso de Corcubión. A su juicio, habría que «pasar aos membros do Consello por aquí para viran como estamos de infraestructuras e demais».