Los desguaces son una alternativa rentable para deshacerse de las piezas de los viejos automóviles
CARBALLO
Cuando un vecino se despoja de su vehículo cabe preguntarse qué hacer con él. Los desguaces legales se han convertido en una alternativa a la hora de que los conductores se deshagan de los residuos contaminantes de sus coches. En este tipo de talleres, los desperdicios de automóviles se someten a un proceso de reciclaje, en el que tiene gran importancia la gestión de los líquidos, que son altamente contaminantes. El esqueleto resultante del despiece pasará a convertirse en chatarra. En algunas ocasiones los propietarios de estos negocios pueden llegar a pagar hasta unos 60 euros por cada pieza, lo que sale más rentable que abandonar el vehículo. Además, estos espacios son lugares en donde se puede hallar todo tipo de repuestos y encontrarlos a un precio más que asequible. No en vano, la reutilización de este tipo de piezas contribuye notablemente a la conservación y cuidado del medio ambiente.