El Puebla venció al Noia, en un partido igualado, con un gol de Pap en el 87
18 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El campo pobrense de A Alta acogió ayer la segunda parte de un duelo entre caballeros muy esperado en la zona, el derbi entre el Puebla y el Noia. Finalmente, y cuando nadie pensaba que el marcador podría moverse un solo ápice, la victoria cayó del lado de los blanquiazules (1-0) en el minuto 87.
El motivo de este tanto in extremis, con la huella de la bota de Pap, se halla en una imprecisión cometida por el meta noiés, Pajarillo, al que el delantero pobrense le robó la bola para marcarla a placer y dejar con la boca abierta al graderío y, por supuesto, a ambos banquillos. Y es que hasta el momento se había tratado de un choque muy igualado.
Gran equilibrio
La primera parte estuvo marcada por la disputa, mas también por la falta de ocasiones para ambos. Fue a la vuelta de vestuarios cuando se vieron diez minutos de claro dominio de los de José Manuel Pose, que fabricaron grandes oportunidades que no tuvieron fortuna en las mallas.
Fueron notorios los ingresos de Espi y Quintairos tras el ecuador del encuentro. El primero incluso tuvo cerca el 2-0 al borde del pitido final, en un mano a mano con el portero que demostró que los regalos no son frecuentes.
Lo cierto es que esta victoria supone unos tres puntos vitales para el Puebla en su carrera por la permanencia, mientras que el Noia sigue a la caza del Viveiro.