¿Cómo se va a hacer? La comercialización del cefalópodo se centralizará en Muros. Pero eso no significa que los compradores tengan que desplazarse a esa rula. Todo al contrario, lo que se pretende es que el pulpo no pase ya por lonja, que a través de una aplicación informática los compradores sepan qué cantidades están disponibles, en qué lugares, de qué barcos y, sobre todo, a qué precio.
Los clientes a los que se quiere captar son, sobre todo, las grandes superficies. De hecho, a una de ellas ya se le está vendiendo de forma experimental y los resultados, según lo manifestado desde el GAC 4, son positivos. De todas formas, cuando la iniciativa eche a andar, se le va a presentar a los posibles compradores para que conozcan de cerca el ambicioso proyecto.