Incapaces

Alicia Fernández LA CRIBA

BARBANZA

02 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Hoy debo confesarles que me da pereza hablar de política. Es uno de esos días en los que observas con hartazgo cuanto sucede. Al habitual escepticismo que me provocan las maneras, los discursos vacíos y la falta de un proyecto creíble en la política patria se suma el asombro y la incredulidad de la reciente no investidura del tal Sánchez. ¿Cómo pueden albergar tanto egoísmo unos políticos tan mediocres como los que campan a sus anchas en esta España nuestra?

A cada detalle que te enteras -pues son tan zafios que lo que tapan por delante lo filtran por detrás- te entran arcadas por la mezquindad y falta de principios de quien aspira a gobernar este país. Hasta el punto de que el líder mejor parado es el denostado Rufián, en su nuevo papel de moderado nacionalista con altura de miras sobre la política nacional. En contraposición, los cinco líderes de las formaciones más votadas no levantan la vista de sus ombligos y su único objetivo parece ser su éxito personal, a pesar de sus continuas referencias al interés general, malgastando su tiempo en jugarretas y trampas que dinamitan la confianza entre ellos. Si ahora fue difícil, en septiembre lo será más.

Pero nada parece perturbar a Pedro, que sigue sumando días de mar como presidente, aunque sea de forma tan poco decorosa. En esta corrida de toros descastados está bordando el papel de don Tancredo, aquel que tanto echara en cara al ya casi añorado Mariano Rajoy. No menos hilarante es el espectáculo de bomberos toreros protagonizado por Casado, Rivera e Iglesias. El problema es que los Miuras de verdad acechan fuera de la plaza: paro, déficit, falta de competitividad, entre otros.