Durante dos meses se prolongaron los trabajos de sustitución del pavimento e instalación del alumbrado
22 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Coincidiendo con la cercanía de la Navidad, los ribeirenses asistían -hace diez años- a la puesta de largo de una reformada praza do Concello, cuyas obras se habían iniciado dos meses antes, y se habían finalizado «en un tiempo récord», como quiso recalcar durante la inauguración el alcalde José Luis Torres Colomer. La actuación, cuyo coste ascendió a 300.000 euros, consistió en la sustitución de todas las baldosas, así como en la instalación de una nueva iluminación, donde se apostó por luces blancas, tanto en todo el entorno como en la zona central, en las que se encuentran las flores ornamentales que circundan la centenaria palmera.
El regidor aprovechaba este acto para anunciar que el arquitecto municipal estaba trabajando en un proyecto para recubrir con piedra toda la fachada de las casa consistorial, con el objetivo de que armonizara con la nueva plaza. Además, la actuación también incluiría obras en las escaleras de acceso para evitar los resbalones.