Yo aún soy Cake

Estevo Silva Piñeiro SOSPECHOSO HABITUAL

BARBANZA

12 nov 2016 . Actualizado a las 22:41 h.

Hace unos días se cumplió el aniversario de un hecho que conmocionó a Boiro: el operativo antiterrorista contra ese ente denominado Resistencia Galega. Este suceso hizo que un buen amigo pasase tres días privado de su libertad e incomunicado en la comandancia de Tres Cantos en Madrid por el simple hecho de pensar que Galicia debe ser un estado independiente, acusado de pertenencia a banda armada nada menos.

A priori, los que no somos independentistas podemos tener la tendencia a pensar eso tan nuestro de que «algo habrá hecho», pero los que conocemos a Cake sabemos de su carácter pacífico y honesto, de su amor por los animales, su familia, el C.?D. Boiro y sí, también por su país.

No puedo hablar por los demás detenidos porque no los conozco, pero Cake siempre ha respetado a sus amigos piensen lo que piensen y nunca me ha intentado imponer su manera de pensar más allá de la natural defensa de unos principios democráticos.

Es de justicia, un año después, recordar aquel momento tan duro para él y su familia, sometida al escarnio público de una parte del pueblo con escaso discernimiento, pero como dice su madre nunca es tarde para abrir los ojos a la cruda realidad de este estado en el que vivimos, más preocupado por la farándula que por la justicia.

No quiero dejar de recordar las grabaciones del, por fortuna, ya exministro Fernández Díaz confabulando un complot contra los partidos catalanes confirmándonos que, en ocasiones, los que se dicen paladines de nuestro estado de derecho son en realidad lastres para el avance de nuestra sociedad.