La Guardia Civil de Boiro dio anteayer al traste con la historia de película que protagonizaba un vecino de Miño, F.?J.?C.?V. y de 37 años de edad. Este varón, que cuenta con un amplio historial delictivo, acabó detenido después de que, supuestamente, alquilase coches de lujo en una empresa de Ribeira haciéndose pasar por un guardia civil, y aprovechándose de la confianza depositada por los dueños del negocio en los agentes del instituto armado.
El hombre llevaba unos días pernoctando en una pensión de Boiro. Debió de prepararse a fondo para intentar salir airoso de la supuesta estafa. No en vano, al parecer, sabía nombres y detalles de los agentes del acuartelamiento boirense. Asimismo, a quien quisiese escucharle, le narraba algunas de las acciones policiales llevadas a cabo por este cuerpo, que coincidían con operaciones verídicas.
Con todos esos datos se presentó en una empresa de alquiler de coches de Ribeira, donde supuestamente rentó al menos un turismo de la marca Cadillac, de alta gama, con el pretexto de la próxima visita de Sus Majestades a Boiro.
Sin embargo, las cosas empezaron a torcérsele a este hombre cuando se le requirió el importe del alquiler del turismo y facilitó un número de cuenta inexistente. Acto seguido, la empresa perjudicada puso en conocimiento de las fuerzas del orden los hechos ocurridos y se comenzó a investigar. Paralelamente, al parecer, en Boiro circulaban rumores también de que había un hombre haciéndose pasar por guardia civil.
Anteayer, la investigación llegó a buen puerto con la detención de esta persona. Según indicaron fuentes próximas al instituto armado, al imputado le constan una veintena de antecedentes penales por estafas. Asimismo, según las mismas fuentes, gracias a la detención se pudo aclarar una supuesta estafa cometida en Mugardos.