MARÍA JOSÉ MIYARES LA ENTREVISTA Ramona Pérez, responsable en Ribeira de la organización no gubernamental Manos Unidas
05 mar 2002 . Actualizado a las 06:00 h.La solidaridad con los menos favorecidos es el leitmotiv de Manos Unidas. Es el mismo motor que impulsa las acciones de un grupo de doce mujeres ribeirenses, con Ramona Pérez a la cabeza, que llevan la voz cantante de la organización no gubernamental en este municipio. Ahora están embarcadas en una nueva campaña. Necesitan nada menos que un millón y medio de euros (26,5 millones de pesetas) para paliar las necesidades de 7.000 niños paquistaníes que viven prácticamente en la calle. -¿En qué consiste este nuevo proyecto? -Tenemos previsto dotar de los servicios necesarios al barrio Lahore, situado en una ciudad paquistaní en la que se concentra mucha población procedente de zonas rurales. En esta zona viven unos 7.000 niños en muy malas condiciones, prácticamente están en la calle. -¿Cómo tuvieron conocimiento de esta realidad? -Manos Unidas en Madrid es la que propone proyectos a la sede de Santiago. Nosotros nos enteramos y nos pareció una iniciativa grande en humanidad, pero también en dinero. -Necesitarán mucha colaboración, entonces. -La verdad es que sí. Trataremos de que se involucren las parroquias del municipio ribeirense y de otros del Barbanza, porque es una cantidad muy elevada de dinero. También hablaremos con el Concello, que siempre nos apoyó en todos los planes que llevamos a cabo, desde el año 1998, cuando ocurrió la catástrofe del huracán Mitch. -¿Qué tienen pensado hacer para lograr recaudar tanto dinero? -Todavía no decidimos nada concreto, pero lo más seguro es que montemos un mercadillo, vendamos camisetas y a ver si organizamos un festival en el auditorio, en el que haya actuaciones y una representación teatral, con la ayuda de Luciano Fernández y Chiqui Durán. Don Cesáreo, el cura, también colabora mucho con nosotras y ya hizo dos colectas para este fin. También es importante lo que recaudamos de las huchas que tenemos repartidas en los establecimientos de Ribeira. -También harán falta muchas manos. -Sí. En Ribeira somos un grupo de unas doce mujeres que colaboramos activamente, que siempre estamos al pie del cañón para organizar actividades, pero necesitamos a más personas que se involucren en los proyectos que intentamos sacar adelante. También es importante la colaboración vecinal, sobre todo, para el programa de ayuda a esos 7.000 niños de Paquistán.