Pablo Crespo montó en 1998 una operación que en Vilagarcía se denominó Caixa Connection, pero terminó convertida en Caixa Desconnection, tras una cena en Loliña de la que salió un grupo de bancarios, constructores, notarios y notables que acabaron como el rosario de la aurora cuando desde el Puerto se impulsó el centro de ocio (cines, pubs, McDonald's) chocando con promotores inmobiliarios que habían estado en aquella cena fundacional.
El Wall Street a escala local
El Wall Street a escala local de la banca de los 90 giraba alrededor de la cafetería Plaza, siempre en el entorno de la plaza de Galicia. Con el paso de los años, aquella cafetería desapareció y con ella el esplendor de la banca vilagarciana: fusiones y desapariciones a partir de 2008 cambiaron el panorama, la banca on line deshumanizó las finanzas y ahora, ya ven, las sucursales periféricas cierran y con ellas perdemos un estilo de vida en el que el dinero y el trato humano iban de la mano.