El PP apoya al BNG en Catoira pidiendo entrar en el gobierno y destrona a Alberto García después de 30 años

La Voz CATOIRA / LA VOZ

CATOIRA

Martina Miser

El ya excaldade socialista se negó a entregar el bastón de mando al nacionalista Xoán Castaño y se marchó del salón de plenos antes de que su suceso tomase la palabra

15 jun 2019 . Actualizado a las 13:41 h.

Seísmo en la política arousana. El regidor más longevo de la comarca, el socialista Alberto García, que accedió a la alcaldía en 1989, ha caído. De poco le ha servido al PSOE ser la lista más votada en Catoira, ya que la pérdida de la mayoría absoluta puso el gobierno local a tiro de la oposición, conformada por BNG, segunda fuerza, y PP, tercera. Dado lo antagónico de las relaciones entre nacionalistas y populares, nadie en principio apostaría por este resultado. Pero en el municipio vikingo hace tiempo que unos y otros apostaban por poner fin al prolongado mandato de García. La asamblea del Bloque decidió presentar a su propio candidato, Xoán Castaño, y con ello abrió la puerta a que la gaviota, aun sin existir un pacto entre ambos, lo votase para poner fin a treinta años de predominio socialista. Iván Caamaño, el portavoz conservador, lo venía advirtiendo desde el 26J y hoy, poco después de las once de la mañana, cumplió lo que anunciaba. Con una puesta en escena de tintes épicos -Caamaño enseñó al público su voto y no dudó en proclamar "Por Catoira" cuando lo depósito- se consumó el vuelco.

García, eso sí, ni entregó el bastón de mando a su sucesor, Xoán Castaño, ni permaneció en el salón de plenos para escuchar las primeras palabras del nacionalista como nuevo alcalde. En Catoira se produjo lo inesperado.

El PP quiere un gobierno de coalición

Concluida la sesión de elección de alcalde, el popular Iván Caamaño declaró ante la prensa que «pola nosa parte, solicitaremos entrar no goberno», subrayando que el BNG «necesítanos, igual que nós os teriamos necesitado se gobernaramos nós». En este sentido, y preguntado si ambas formaciones habían llegado a la sesión de investidura con algún tipo de acuerdo o de pacto escrito, Caamaño respondió con un «Hoxe iso non se pode... non é ben falalo. Hoxe é un día de alegría, un día de cambio. (...) Quedará para nós, para o Partido Popular e para o BNG, se as houbo».

A estas palabras el nuevo alcalde de Catoira, Xoán Castaño, aseguró que «non hai un pacto» con el PP, pero tampoco negó la opción de constituír un gobierno de coalición entre los nacionalistas y populares. Sobre la petición de Iván Caamaño, Castaño dijo que «nós estudaremos iso para o pleno de funcionamento, e teremos que debatilo, e estudalo». Un pleno de construcción y reparto de las áreas de gobierno fijado para dentro de 30 días. Por delante, un largo mes que abre un horizonte de posibilidades radicalmente diferentes para la gobernabilidad de la localidad vikinga.