Somos reclama a la Xunta que suba su contribución al SAF, alertando de que en Cambados superará el millón de euros
CAMBADOS
Propone que la aportación del gobierno autonómico aumente de manera progresiva hasta alcanzar un 60 % en el 2027
21 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Tino Cordal, líder de Somos Cambados, presentará ante el pleno de la corporación municipal una propuesta a debatir acerca del estado, tanto a nivel local como autonómico, de los Servicios de Axuda no Fogar (SAF). Cordal denuncia una serie de déficits e irregularidades, tales como la situación de precariedad laboral en la que se encuentran sus trabajadores, mayoritariamente mujeres, carencias en la financiación y el impacto que todo ello tiene en la calidad del servicio.
La reclamación fundamental de Somos tiene como destinataria la Xunta de Galicia, habida cuenta que los SAF son competencia del órgano autonómico. Según los datos recogidos por Cordal, la aportación conjunta de Xunta y gobierno central sufraga 12 euros la hora de un servicio cuyos costes superan los 20 euros la hora. La diferencia debe ser asumida por los concellos y por los usuarios, lo que supone, afirman, «unha pesada carga económica para os concellos de Galicia». En el caso del municipio cambadés, en el año 2024 el ente local debió invertir 930.000 euros en este servicio, y según las cuentas del líder de Somos Cambados, esa suma podría ascender por encima del millón de euros en el 2026.
El partido, integrante del cuatripartito que gobierna el Concello de Cambados, reclama a la Xunta que aumente de manera progresiva su participación en la financiación en los próximos años: del 27,35 % que, según Cordal, aportó en el 2024, debería pasar a un 50 % en el 2026 y a un 60 % en el 2027.
Las peticiones van más allá de lo económico. Desde Somos hablan de «precariedade laboral crónica» entre las empleadas del servicio: «O convenio colectivo está sen actualizar dende 2011, con salarios, en moitos casos, arredor de 1.200 euros brutos para xornadas completas e contratos a tempo parcial de 20 horas semanais». Apuntan, además, a la situación de vulnerabilidad que sufren las trabajadoras, debido a que «carecen de protocolos claros de prevención de riscos e medidas fronte a situacións de acoso». Todo ello, sostienen, deriva en situaciones de «sobrecarga» para los trabajadores, «listas de espera para as persoas dependentes» y, en conclusión, un deterioro generalizado del servicio prestado.
Somos reclama actualizar el convenio colectivo «equiparando salarios ao IPC e eliminando escalas salariais discriminatorias» e implantar protocolos ante posibles situaciones de riesgo para los empleados.