Las excelentes ocasiones marradas ante el colista desnudan el talón de Aquiles arlequinado: la falta de hombres-gol que sí tienen sus rivales
17 feb 2015 . Actualizado a las 15:43 h.La victoria visitante era el pasado sábado el único resultado aceptable para un aspirante a la fase de ascenso como el Arousa en el campo del Bertamiráns. Colista con 6 puntos en 24 jornadas de Liga, su propio entrenador, Raúl Bralo, confesaba 48 horas antes de la visita del conjunto vilagarciano que en su club se había asumido ya la realidad del descenso al término de la presente temporada. El cuadro dirigido por Piscis se volvió a A Lomba con 1 solo punto en la bolsa de viaje.
Hizo todo lo necesario el equipo vilagarciano para firmar el triunfo, pero le faltó lo único imprescindible para ganar un partido de fútbol: el gol. Los de José Luis Uhía generaron hasta una decena de ocasiones con potencial para desbloquear el a la postre 0-0 en el marcador, alguna a portería vacía. Esfuerzo baldío.
En Bertamiráns jugadores, cuerpo técnico y afición arlequinadas volvieron a escuchar la desafinada armonía machacona de la que el entrenador arousista tantas veces se ha lamentado la presente campaña. La de tantas oportunidades perdidas en la finalización frente a la portería rival, y su consiguiente penalización en el casillero de puntos.
El desahuciado colista de la Tercera puso el sábado de manifiesto en toda su dimensión el gran problema arrastrado por el Arousa, que le impide exprimir jornadas como la del pasado fin de semana para regresar a la zona de promoción con tres rivales directos perdiendo sus partidos y su vecino Ribadumia salvando un empate en el tiempo de prolongación. Y es que al Arousa le falta un hombre-gol; cuando lo que aconseja la competición es disponer de al menos un par de ellos.
Eso es lo que se desprende de la tabla de realizadores de la Tercera, y la presencia en la misma de futbolistas de los cuatro primeros clasificados. El Pontevedra cuenta con el cuarto máximo goleador de la Liga, Pablo Carnero, con 11 tantos, secundado por Jacobo y Jorge Rodríguez con 5 cada uno y solo uno de penalti, obra de este último, a lo que añade la mejor defensa del campeonato: 15 dianas en contra en 25 partidos -el Arousa, 22-. El Dépor B suma entre Cardoso (11), Marcos Remeseiro (6, 1 de p.) y Dani Iglesias (5) 22 tantos. El Cerceda, con el mejor ataque de la Liga (44), ha logrado 31 goles de la mano de Cano (10), Uxío (8, 1 de p.), Dani (5) y Herbert (5, 1 de p.). Por su parte el Ribadumia (43 en total) lleva 30 tantos entre Changui (21, 4 de penalti) y Sylla (9), el último del delantero africano salvando el domingo un punto en el minuto 92 frente al Bergantiños.
¿Y el Arousa? Camiño es su pichichi con 9 dianas, con el matiz de que más de la mitad, 5, las clavó de penalti. Javi Pazos lleva 7 goles. Y de ahí, a los 3 por cabeza de otros tres delanteros Cubas, Capelo, y Nando, y un mediocentro, Rivas. Cerrado el mercado, el Arousa necesita hallar ya mecha seca para no acabar la Liga cargado de pólvora sin explotar.