Globomedia ficha al grovense Miguel Vilas, que acaba de desfilar para David Delfín e Isabel Mastache
03 mar 2010 . Actualizado a las 12:35 h.Quién sabe si Miguel Vilas Rodríguez será algún día el nuevo Miguel Ángel Silvestre. Por ahora amaga con convertirse en el Jon Kortajarena gallego después de desfilar la semana pasada en Cibeles para David Delfín, Carlos Doblas, y la también gallega Isabel Mastache.
El modelo grovense, orgulloso de serlo, fue uno de los 15 varones seleccionados por la organización de Cibeles entre 500 aspirantes durante el casting previo. A esa prueba acudió también el director de una nueva serie para televisión que prepara y esconde celosamente la productora Globomedia (Los hombres de Paco, Águila Roja, El internado), y lo eligió a él.
Su debut televisivo será como el camarero gay de un bar al que acuden los demás personajes de la serie, al estilo de la americana Friends . «Me pidió si podía hacerme una prueba para un nuevo programa que se emitirá en una cadena privada española. Me hizo tres, y cuando me quise dar cuenta estábamos grabando, ¡y conmigo como protagonista!», se sorprende.
Sobre la serie no suelta prenda, porque «es todo secreto», pero avanza con humor algunas claves de su personaje, el dueño del bar: «Hago de hiperdiva gay reprimida, y el director quiere aprovechar mi vertiente más femenina para el personaje, así que me pide constantemente que me mueva como Naomi Campbell. Llego a casa con agujetas en las caderas».
Su fulgurante salto a la tele implica ciertos peajes. «Yo salgo de la nada -explica-. No sé hacer bien las paradas, gesticular... Como dice mi director, vengo de la calle. Por eso, un actor de Amar en tiempos revueltos me da la pauta y corrige lo que hago mal» . Con apenas 25 años, Miguel prepara otro papel tras la cámara, esta vez como protagonista de un anuncio para televisión de la firma de automóviles Kia. «El spot de Rafa Nadal, pero para Japón», precisa.
Mientras tanto, su agencia, Chic Models, intentará el desembarco en Milán porque considera que sus facciones y su 1,91 de estatura lo convierten en firme candidato a triunfar en casa de Armani. De momento son las revistas las que se lo rifan. Tendencias será la próxima en hablar de él.
Desfilar es su vocación «desde niño», cuando le decía a su madre que quería «ser modelo. Nunca se lo agradeceré lo suficiente», resalta. Lo logró con solo 16 años. Camariñas, Pontus Veteris... y Cibeles. Pero para conseguirlo tuvo que dejar sus estudios de técnico socio-sanitario e intérprete de signos en Vigo, «y también mi trabajo como profesor en daño cerebral», admite.
«Muchos adolescentes contactan conmigo en redes sociales, me preguntan las medidas y me confiesan que quieren ser modelos. Me gustaría decirles a todos que, si es lo que les gusta, luchen por hacer realidad todos sus sueños, y que no se queden en casa».