Un viaje al mundo submarino

La Voz

AROUSA

VITOR MEJUTO

El palomar La obra del artista y escultor César Lombera estará expuesta en el Auditorio hasta el próximo 27 de agosto. Las imágenes representan la magia y los misterios del mar.

06 ago 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

Debo confesar que somos muy pocos los que, bajo una temperatura de más de 31 grados como la que estamos viviendo estos días en Arousa, toman la decisión de cambiar las aguas frescas de A Concha, de As Sinas o de A Lanzada por una exposición sobre el mundo submarino. No nos vamos a engañar. No es lo mismo, y menos para aquellos a los que el arte les suena un poco a chino. Reconozco que yo soy una de esas tantas mortales que va a la playa sin pensárselo dos veces y que dejan el arte para los días nublados y lluviosos. No voy a mentir. Sin embargo, el otro día preferí cambiar un asado seguro en la arena por las galerías del auditorio de Vilagarcía y les aseguro que no me arrepiento. Con sólo un primer vistazo al interior supe que la decisión había sido la correcta. Una exploración marina Está claro que César Lombera sabía que presentar una exposición en el mes de agosto era arriesgado, pero se nota que él es un artista de altas tensiones a juzgar por la temática de sus obras. Como buena arousana he vivido siempre preocupada por el mar y por los misterios que este esconde. Cuando era pequeña, mi abuelo me entretenía con historias de corsarios en busca de tesoros y de sirenas que perseguían a altos y apuestos marineros. Yo me lo creía ya que siempre me ha fascinado el mundo marino. Sin desajustes y como si todo pareciese real, Lombera te adentra con sus esculturas en ese mundo mágico sólo soñado y vivido en las películas y en las novelas de aventuras. Lombera habla a través de sus esculturas como buen conocedor del mar. Desde hace años practica el buceo y la pesca submarina y sus esculturas están dotadas de esa extraña capacidad que hace que las obras dominen a todo aquel que las observa. Bien es cierto que la ignorancia hace el olvido de los grandes artistas. Miles de personas se fotografían cada día junto a las Marías de la Alameda de Santiago y nadie sabe (y muchas veces ni preguntan) quién ha sido el escultor que las ha colocado allí. Ese mismo artista es el que sueña entre colas de sirenas, entre algas, estrellas marinas y corales. Aunque muy pocos lo saben, César Lombera es uno de esos artistas que dejan huella y la exposición del auditorio tiene todas las papeletas para convertirse en una de las más visitadas. Magia y fantasía El mar siempre ha sido una de las grandes musas del arte. El cine de animación llevó a Nemo a la gran pantalla para disfrute de todos y ahora es Lombera, salvando las distancias, el que acerca a los espectadores a un mundo mágico con ojos de buey, sirenas, tritones y naufragios. Toda una serie de historias que se entrelazan en la magia y en la fantasía de un mundo desconocido para el hombre y tantas veces acariciado por el arte. El amor de César Lombera por el mar le viene desde niño. Hombre de mar y de costa ha esparcido su arte por la villa vilagarciana. El parque de Cavadelo con su Adeus y el del auditorio con su cola de pez han sido algunos de los escenarios elegidos para colocar las obras del artista. Quizás alguna de las esculturas que se pueden apreciar hasta el día 27 de este mes en el auditorio se convierta algún día en un habitual de los parques de alguna de las localidades arousanas. Nunca se sabe. Lo que está claro, y lo digo como fiel seguidora de la obra de Lombera, es que tanto en la calle como en las paredes del auditorio, la obra de este escultor nos sumerge en un nuevo mundo: el placer de viajar a través de las maravillas submarinas.