Quejas vecinales por un prostíbulo «de tapadillo» en el centro histórico de Viveiro

Lucía Rey
lucía rey VIVEIRO / LA VOZ

VIVEIRO

Vecinos del centro se quejan de «movimientos extraños» en torno a una vivienda de Luis Trelles
Vecinos del centro se quejan de «movimientos extraños» en torno a una vivienda de Luis Trelles PEPA LOSADA

Denuncian el «trasiego de hombres» en una calle frecuentada por niños

20 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Un grupo de vecinos del centro histórico de Viveiro ha presentado una queja en la Comisaría de la Policía Nacional de Viveiro para denunciar la puesta en marcha de un prostíbulo «de tapadillo» en la calle Luis Trelles. Según explican, la actividad inusual comenzó el pasado 20 de mayo, cuando una vivienda situada en la citada calle fue alquilada para uso residencial. Al parecer, ya el primer día llegaron a ella varias mujeres desconocidas y comenzó el «trasiego de hombres». «Esta ha sido siempre una calle tranquila, con muchos niños, y ahora parece una calle de hombres», lamentan vecinos que residen en las inmediaciones de la casa afectada. Se trata de un inmueble de tres plantas que fue cuidadosamente rehabilitado hace en torno a seis años. «Es muy pequeño, pero por dentro parece una casa de muñecas, es una maravilla», relataron este martes algunos de quienes han tenido la oportunidad de verlo por dentro.

El mismo grupo de vecinos también se ha dirigido al Concello de Viveiro para expresar las molestias que sufren los habitantes de una zona del casco antiguo en la que numerosas viviendas han sido restauradas en los últimos años, aunque también hay bastantes abandonadas. Indican que de un tiempo a esta parte la presencia de hombres «de todas las edades» es habitual casi a cualquier hora del día o de la noche. «Los primeros días, los hombres que venían golpeaban con bastante fuerza la puerta para que les abriesen, pero ahora deben llamar por teléfono móvil para que les abran porque ya no se escuchan estos golpes tan fuertes», sostienen.

«Movimientos extraños»

Cuentan que algunos residentes ven habitualmente «movimientos extraños», tanto de coches como de personas en el entorno de la vivienda. Y advierten de que en verano, especialmente en agosto, llegan a la calle más niños. «No es agradable para nadie tener una casa de citas en la calle donde vives. Deben tomar medidas», manifiestan.

Testimonio de los vecinos: «Solo queremos tranquilidad y hermanamiento, como siempre»

«Así baila la calle Luis Trelles. E veña festa». Subida a las redes con motivo de la comida organizada por el reciente Mercado Renacentista de Viveiro, así reza la publicación más reciente en el Facebook «Vivir en Luis Trelles». Un perfil social que prueba la unión de los vecinos y de las personas que, de una u otra manera, tienen y conservan algún vínculo con esta emblemática calle del centro histórico. «Siempre ha sido una calle de niños, tranquila, que todavía se engalana por el Corpus, por las fiestas... Aquí somos todos como hermanos. Cuando muere alguien incluso compramos entre todos una corona. Solo queremos tranquilidad y hermanamiento, como tuvimos siempre», destacan algunos de los vecinos molestos con la actividad que de unas semanas a esta parte se desarrolla en una de sus viviendas. «No queremos jaleo, queremos seguir tranquilos», manifiestan.