El armador del Nuevo San Juan: «Quedei paralizado, dicíanme que era todo lume e fume»

A MARIÑA

Dada la cercanía de los dos barcos, el pincheiro burelense habló diez minutos antes del incendio con el arrastrero vigués que lo rescató

04 jul 2023 . Actualizado a las 18:14 h.

Cuando un percance sucede en un barco en alta mar, los perjuicios que pueden ocurrir sobre las personas adquieren otra dimensión debido al peligro que supone el aislamiento en el agua. Y la angustia y el sentido de la responsabilidad de saber que hay marineros a merced de la naturaleza oprimen el pecho. «Dimo a min», afirma Demetrio Paleo, armador del Nuevo San Juan, que resopla al otro lado del teléfono. «Cando me avisaron do que estaba a pasar quedei paralizado. Paralizado», repite, y se queda en silencio tras amagar con volver a hablar. Más allá de los importantes daños materiales en el barco, que ardió y  podría hundirse en las próximas horas, valora que no ha habido bajas tras el rescate de 15 marineros sanos y salvos en Gran Sol.

Dicen que el trueno y el mar enseñan a rezar. Fuese ayuda divina o una feliz circunstancia, el patrón del Nuevo San Juan habló poco antes del incendio, dada la cercanía de las dos naves, con el capitán del barco que los rescató, el arrastrero vigués Nuevo Confurco. «Había dez minutos que falaran para largar libre dos nosos aparellos. Foi unha sorte grande», admite el armador del buque burelense, que apunta no obstante que cuando la tripulación dejó el barco para subirse a las balsas salvavidas, «xa sabía que viña o arrastreiro. Iso axudoulles aos mariñeiros a manter a calma», concreta.

Los acontecimientos dependen a veces de metros o minutos, y el empresario relata que la tripulación del pincheiro «estaba acabando de largar, faltáballes unha soa cacea nada máis».

Sobre la posible causa del incendió, el armador señala que conocer los motivos será «difícil non, seguramente imposible. Ao motorista parécelle que foi un cadro eléctrico que prendeu lume. Quen sabe o que ocorreu. Sucedeu todo rapidísimo, comentaron eles. Dixeron que en pouco tempo era todo lume e fume», concluye.