1997
14 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El salón de actos del centro de servicios sociales de Viveiro acogió el pasado miércoles una proyección de más de doscientas diapositivas sobre el Carnaval en Viveiro desde principios de siglo hasta hoy. Carlos Nuevo Cal acompañó con comentarios las imágenes, ofrecidas por José Manuel Moreno. Numeroso público acudió a San Francisco para recordar estampas que
ya forman parte de la historia del Antroido en la ciudad del Landro. El público participó con sus propios comentarios a la hora de explicar las
comparsas que desfilaron por Viveiro en los años ochenta e incluso en la década de los noventa.
Como era de prever, el acto organizado por el Seminario de Estudos Terra de Viveiro resultó entretenido, despertando en todo momento el interés del público que acudió en la noche del miércoles al salón de actos del centro social.
Especialmente interesantes, por testimoniales, resultaron las imágenes del Carnaval viveirense a finales del siglo XIX. Entonces, en los núcleos rurales como Magazos, Landrove, Galdo, también Celeiro, el Carnaval tenía gran relevancia, tal como recordó Carlos Nuevo Cal.
Diapositivas de una taberna de finales del pasado siglo en Viveiro, de comparsas como Os Montes, Os Toniños, de los grupos musicales de entonces fueron surgiendo las comparsas, realzándose así el Carnaval en Viveiro.
Nuevo Cal aludió a los bandos de las autoridades de entonces con las prohibiciones, hoy ridículas, durante la celebración del Carnaval: por ejemplo, estaba prohibido disfrazarse con atuendos religiosos, de sacerdotes, así como tirar agua, huevos e incluso naranjas al público, a riesgo de acabar en la cárcel.
Auge a partir de 1961
Durante los años de la guerra civil el Carnaval ?si bien
no desapareció? prácticamente se redujo a pequeñas festividades en sociedades locales de la época, así, en el Casino.
El arranque real del Antroido en Viveiro tuvo lugar de
nuevo a partir de 1961, en opinión de Nuevo Cal. «Houbo desde entón grandes antroideiros en Viveiro, entre eles Pedro Rouco, Pepé, Paco de Acacio, etc (nombró a un buen número de conocidos animadores de la festividad del Carnaval, la mayor parte de ellos ya desaparecidos)».
La proyección concluyó con unas imágenes relativas al popular enterro da sardiña, tradición que en la actualidad se ha perdido en Viveiro y que, según Carlos Nuevo, era la que registraba una mayor participación popular.