Reclaman a la empresa que los readmita y anuncian un calendario de movilizaciones
18 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los trabajadores de Arriva-Noroeste afectados por la concesión a la UTE Morán Rodríguez del servicio de transportes Viveiro-Ribadeo con anexos, afrontan una penosa situación. Tienen sus contratos blindados, pero nadie les da empleo ni les paga desde el pasado 8 de agosto. Al menos, tras la mediación de la Xunta, han comenzado a cobrar el subsidio de desempleo: «Estamos en la calle por el famoso Plan de Transportes que la Xunta puso en marcha, sin duda pensando en el beneficio de todos, pero que a nosotros, a los extrabajadores de Arriva, nos dejó indefensos», señalan.
Son nueve, pues la UTE Morán-Rodríguez solo contrató a una parte de los chóferes que Arriva subrogó. La Xunta amenazó con retirar la concesión a la UTE, pero esta semana se planteó un nuevo escenario, pues inicialmente se demostró que Arriva había tratado de subrogar a más trabajadores de los que realmente realizaban el servicio. La Xunta instó a las dos empresas a buscar una solución, pero de momento todo parece abocado a resolverse en los tribunales.
En tanto, los afectados recuerdan: «A la UTE la Xunta le adjudicó la concesión. Hasta ahí todo normal». Arriva subrogó a 14 trabajadores, alguno de ellos con más de treinta años de antigüedad: «Nos extrañó, porque para esa línea con 5 ó 6 conductores es más que suficiente. La UTE Morán-Rodríguez, viendo excesivos los trabajadores que Arriva subrogó, nos dejó en la calle. Y ahí estamos», cuentan.
«Según tenemos entendido, Arriva lo que hizo fue un ERE encubierto, pues no fue capaz de demostrar que los 14 trabajadores fuesen subrogables. Y ahí estamos; la Justicia dirimiendo quién fue y por qué, y mientras tanto nosotros, con nuestro puesto de trabajo ‘blindado’, en la calle esperando a que la Justicia haga su trabajo. Pero no vamos a estar callados. Vamos a poner en marcha un calendario de movilizaciones este mismo mes, porque creemos que no hay derecho a que, por no sé quién tiene la culpa, la paguemos los de siempre», relata uno de los trabajadores afectados.
Y concluye: «Por lo tanto, exigimos que mientras no se esclarezcan las posibles responsabilidades, seamos readmitidos en ‘nuestra empresa’ Arriva».
Su perplejidad va a más cuando, aseguran, Arriva está contratando personal en A Mariña para cubrir algunos de los trayectos que ellos realizaban, por ejemplo el Ribadeo-Lugo.