El alcalde local de O Valadouro, Edmundo Maseda, alerta del riesgo de incendio que existe en la comarca con esta situación climatológica (viento y mucha sequía en el suelo) y la ausencia de brigadas de incendio que, explicó, no está previsto que empiecen a trabajar hasta mediados de julio.
En su caso, explicó, hacen todo cuanto pueden para ayudar. El Concello tiene una motobomba y cuando hay un incendio y ya van dos en la misma parroquia en menos de una semana, buscan un operario del Concello que tenga carné de primera para que conduzca el vehículo. Normalmente le toca al fontanero que, al tener ayer tres averías, tuvo que ser sustituido por el que maneja la máquina desbrozadora.
Pero estos medios son totalmente insuficientes. El sábado pasado tuvieron que acudir a los montes de Budián dos helicópteros, unidades de Ourense y otros equipos antiincendios de la Xunta. El jueves, según confirmó la Xunta, desplazaron cuatro agentes, cinco brigadas, un grumir, cuatro motobombas y un helicóptero. Y ayer había personal de retén vigilando para que los rescoldos no causaran un nuevo incendio. «Está apagado pero levántase aire, vamos estar atentos a como anda o vento, pero fan falla as brigadas».