La querencia de los cacos por las empresas situadas en el polígono industrial de Xove es recurrente. Hace pocas semanas intentaron entrar en un par de locales y el sábado por la noche volvieron a visitar el lugar.
Según explicaron, rompieron los cristales de la parte trasera de una empresa de hormigón y accedieron a la zona de taquillas, donde se hicieron con la calderilla que encontraron y cuyo importe es escaso.
Luego se atrevieron con otra empresa constructora de obra civil, a la que forzaron la puerta para entrar a pesar de que la instalación está rodeada de cámaras. Entonces saltó la alarma y los cacos se dieron a la fuga antes de que tuvieran tiempo a robar nada. Cuando los vigilantes llegaron, pasados muy pocos minutos, ya se habían ido.
Ahora las autoridades estudian las imágenes captadas por las cámaras situadas en el exterior de varias empresas del polígono donde, al parecer, captaron el movimiento de un coche de color oscuro.
Por otra parte, a las cinco de la madrugada de ese día volcó un coche que subía hacia A Rigueira. No hubo heridos.