Las monjas clarisas de Ribadeo han donado un lote de 237 libros a la biblioteca de Viveiro. Los volúmenes pertenecían a Gonzalo López, que ejerció de ATS (auxiliar técnico sanitario) durante muchos años en la ciudad del Landro. Gonzalo López legó su biblioteca a las religiosas del Monasterio de Santa Clara. Las dos hermanas de su esposa, la viveirense Rita Aparicio, también fallecida, habitan en este convento. De ahí la estrecha relación de las monjas con la pareja. «Eran un matrimonio con muchísima fe, que veían la muerte como una puerta para llegar a algo mejor», subrayó sor Encarnación Agrelo, la madre superiora. El alcalde de Viveiro, el popular César Aja, remitió una carta de agradecimiento a las hermanas por la cesión de los libros. «Ellos no habían hecho ninguna indicación, pero seguramente les hubiera parecido estupendo dar este obsequio al pueblo viveirense», señaló la responsable del convento. El legado consta de volúmenes sobre medicina, historia y cultura general. La biblioteca de Viveiro se encuentra junto a Extensión Agraria, al lado del juzgado, desde su traslado de la Praza Maior.