Una multitudinaria marcha atravesó ayer Caracas para manifestar su rechazo a la reelección de Hugo Chávez, a una semana del referendo en el que los venezolanos se pronunciarán sobre la enmienda constitucional que permitiría la postulación del presidente por tiempo ilimitado. La manifestación transcurrió sin incidentes, a pesar de los pronósticos que auguraban violencia, y en medio de una fuerza de 2.500 agentes enviados por el Gobierno.
La marcha fue convocada por el movimiento de estudiantes universitarios que rechaza la enmienda y sus principales dirigentes caminaron entre la gente con camisetas blancas con el «No» estampado en el pecho y tatuado en las palmas de sus manos. Acompañada por bandas musicales, la manifestación recorrió pacíficamente más de 15 kilómetros hasta el punto de llegada en el centro de la cuidad, donde los participantes ondearon banderas venezolanas y pancartas con la consigna de «No» a la reelección ilimitada.
A las varias decenas de miles de personas se sumaron todos los partidos opositores y grupos civiles que asumieron la campaña contra la enmienda. El recorrido fue cubierto en varias horas, en las que la marcha serpenteó bulliciosa desde el este de la ciudad hasta el punto de llegada, donde los dirigentes le hablaron a los participantes en la céntrica avenida Libertador en lo que es el cierre de su campaña en Caracas. El llamamiento de los opositores a los venezolanos fue el de acudir a las urnas el domingo 15 de febrero, para que solo los votos pueden garantizar la diferencia.
Pendiente de la participación
Las principales encuestas dan una ventaja de entre cinco y nueve puntos al rechazo a la reelección ilimitada, pese a que la campaña de propaganda gubernamental muestra un amplio avance de la opción del sí.
Encuestas publicadas horas antes de que cierre el lapso permitido para su divulgación (que concluye hoy) muestran que el triunfo del no está, sin embargo, sujeto a la participación electoral. Una abstención mayor de 40% haría posible la victoria del sí, indicó el politólogo independiente John Magdaleno. Si la no concurrencia a las urnas estuviese en los niveles de las pasadas elecciones regionales, alrededor de 30%, «el triunfo del no es indetenible», afirma.
Incluso las encuestadoras proclives al oficialismo (y que se equivocaron en numerosas gobernaciones y alcaldías en las regionales) dan ganador al sí con un margen tan estrecho que, afirma el experto, «tienen una lectura política interesante».
Aunque el sí logró ponerse muy cerca del no hace dos semanas, varios hechos han influido en el aumento del rechazo a la reelección de Chávez, como el ataque a una sinagoga en Caracas, luego de las condenas del presidente y sus ministros a Israel por la invasión de la franja de Gaza; así como el haber decretado el pasado 2 de febrero (cuando cumplió diez años de su llegada a la presidencia) como día festivo obligatorio, en el que funcionarios de la Guardia Nacional amenazaron con multas a los comerciantes que tenían sus locales abiertos.
Además, en una entrevista con la CNN, Chávez calificó como una infamia que en Venezuela exista más inseguridad que en otros países latinoamericanos, agregando: «A mí, en 54 años, nunca me ha pasado nada». Esta declaración fue tomada como una afrenta por muchos venezolanos, que ven la delincuencia como el principal problema del país. En enero, en la capital de 5 millones de habitantes se registraron 277 homicidios -un promedio de nueve cada día-, con un incremento de 15% sobre el mismo mes del 2008.
Tendencias cambiantes
«En una elección tan cerrada, las tendencias cambian todos los días», indicó Magdaleno, quien agregó que el fiel de la balanza lo tendrán los llamados ni-ni , no asociados a la oposición ni al oficialismo, y que en casi dos tercios se oponen a la denominada reelección presidencial indefinida. Las estimaciones de abstención se ubican entre 12 y 24%, pero los niveles históricos están entre 30 y 40%.
El cierre del período para presentar sondeos de opinión viene acompañado de una auténtica guerra de encuestas lanzadas desde el Gobierno, en las que, a través de empresas que le son afines (como North American Opinion Research, IVAD y GIS XXI, de la que es propietario un ex ministro de Finanzas) el sí gana por amplio margen. El Consejo Nacional Electoral permitió extender un día más el lapso para publicar sondeos, que concluía ayer; según voceros opositores, con la finalidad de «confundir al electorado».