Con trece años en la política internacional a sus espaldas, el diplomático media desde su casa de verano en las negociaciones entre las grandes potencias y Teherán
06 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.En mangas de camisa y zapatillas de deporte, debajo de una parra y con la ría de Pontevedra al fondo, Javier Solana hizo un hueco ayer en sus vacaciones para hacer un pequeño repaso de los acontecimientos del año, con la vista puesta en la respuesta deTeherán a las oferta de negociación lanzada por las cinco potencias del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania (el llamado 5+1). El jefe de la diplomacia europea convierte cada verano a Bueu en centro diplomático internacional en el que se discuten asuntos tan importantes como el contencioso nuclear con el régimen de los ayatolás.
-El lunes mantuvo una conversación telefónica con el negociador iraní, Said Yalili, y las potencias anunciaron una batería de nuevas sanciones contra Teherán.
-Tuve una conversación con el responsable iraní, me he visto muchas veces con él, también con su predecesor [Alí Lariyani].
-Mucho más duro Yalili que Lariyani ¿no?
-No creo que sea una cuestión de dureza, no hay gran diferencia entre las posiciones de uno y otro. Después de la conversación hable con los países que estoy representando en esta negociación, Irán me va a enviar un documento durante el día [por la tarde dicho documento llegó a sus manos], que tendré que analizar. En los próximos días, contactaré con los seis países que están involucrados en la negociación más la UE y trataremos los siguientes pasos a dar. En Teherán saben muy bien lo que queremos para poder entrar en una negociación seria y profunda que trate de clarificar los muchos problemas pero también las muchas posibilidades y oportunidades que se tiene con Irán.
-Pero, ¿está negociación no es como una pescadilla que se muerde la cola?
-Es que los problemas internacionales no son de solución fácil cuando vienen de muy atrás, piense que EE.?UU. no tiene relaciones diplomáticas con Teherán desde hace muchos tiempo por lo que partimos desde una posición difícil. Pero Irán es un país con una gran historia, y nos gustaría tener relaciones sólidas. Lo que es verdad es que para eso tenemos que tener claro dos aspectos de su programa nuclear: tiene que dar garantías objetivas de que sus aspiraciones son estrictamente pacíficas -es decir, centradas en la producción de energía- y que no tiene en mente ninguna desviación hacia otros fines como es la de obtener bombas atómicas.
-¿Siria esta teniendo algún papel mediador
-Siria es un país que puede jugar un papel constructivo en Oriente Medio. Aunque no creo que puedan jugar un papel negociador, si nos gustaría que tuviera una relación con Teherán más clara, diciéndole las cosas de manera más contundente.
-¿Y los tambores de guerra que suenan desde Washington?
-Creo que nadie quiere que la solución a la crisis no sea diplomática, es decir pacífica.